Crítica:CRÍTICAPOP

Entre amigos

Alberto TarínBlack Note Club. Valencia, 16 de diciembre de 1999.

El reputado guitarrista valenciano Alberto Tarín deseaba mostrar y, de paso, chequear sobre el escenario su nueva propuesta antes de ser editada. Y lo hizo rodeado de amigos; así, Julio Bustamante, Sergio Monleón, Santi Navalón o Puchi Balanzá fueron algunos de los que acudieron a la cita, disfrutaron de un espectáculo íntimo y hasta subieron encantados al escenario para acompañar al anfitrión. A Bustamante le tocó ceder su voz para un reggae de ritmo contagioso, pero que dejaba demasiado al descubierto el punto más débil...

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Alberto TarínBlack Note Club. Valencia, 16 de diciembre de 1999.

El reputado guitarrista valenciano Alberto Tarín deseaba mostrar y, de paso, chequear sobre el escenario su nueva propuesta antes de ser editada. Y lo hizo rodeado de amigos; así, Julio Bustamante, Sergio Monleón, Santi Navalón o Puchi Balanzá fueron algunos de los que acudieron a la cita, disfrutaron de un espectáculo íntimo y hasta subieron encantados al escenario para acompañar al anfitrión. A Bustamante le tocó ceder su voz para un reggae de ritmo contagioso, pero que dejaba demasiado al descubierto el punto más débil del cancionero de Tarín: los textos. Un estribillo como "Vive el momento y deja el aburrimiento a un lado" resulta excesivamente tópico. Sobre todo porque si de algo pretende huir su música es de los convencionalismos y de las recetas estilísticas puras. Su actual propuesta pasa por fusionar el reggae con el jazz, aunque también estuvo presente su pasión por el blues, el pop o el rock latino. Un colorista y tórrido cóctel perfecto para combatir los rigores del más crudo invierno.

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