Perder venciendo

Cuando los socialistas catalanes desafiaron a Jordi Pujol y a la formación nacionalista CiU en las quintas elecciones autonómicas desde 1980 tenían más o menos las mismas posibilidades que sus colegas bávaros frente a la CSU y su soberano, Franz-Josef Strauss: ninguna.Hace tiempo que el astuto Pujol es algo más que uno de los 17 barones regionales españoles: se ha convertido en un peso pesado de proyección europea, que además respalda las mayorías del Gobierno central en Madrid, a veces de izquierdas, a veces de derechas. (...)

Sin embargo, al sexto intento los socialistas han conseguid...

Cuando los socialistas catalanes desafiaron a Jordi Pujol y a la formación nacionalista CiU en las quintas elecciones autonómicas desde 1980 tenían más o menos las mismas posibilidades que sus colegas bávaros frente a la CSU y su soberano, Franz-Josef Strauss: ninguna.Hace tiempo que el astuto Pujol es algo más que uno de los 17 barones regionales españoles: se ha convertido en un peso pesado de proyección europea, que además respalda las mayorías del Gobierno central en Madrid, a veces de izquierdas, a veces de derechas. (...)

Sin embargo, al sexto intento los socialistas han conseguido, por fin, la victoria. Y, sin embargo, han vuelto a perder. ¿Cómo ha podido ocurrir? Ésta es una más de las peculiaridades de este territorio que habla un idioma propio. Según el porcentaje de votos, el candidato socialista, Pasqual Maragall, ha ganado por un exiguo margen, el 37,88% frente al 37,68% de Pujol. Sin embargo, en el Parlamento catalán CiU dispondrá de cuatro escaños más debido a la diferente ponderación del voto de las cuatro circunscripciones electorales. De este modo, una derrota se ha transmutado en una victoria para el patriarca. (...)

El reloj, pues, también marca un tiempo diferente en Cataluña, aunque los socialistas han renovado sus esperanzas, incluso en relación con las elecciones generales de la próxima primavera. Atención: tener el candidato adecuado es determinante y alguna vez incluso los catalanes se hartarán de la codicia de poder. (...)