La mayoría de la gestora del PSPV se rebela contra su presidente y veta la propuesta de Puig

La dirección provisional del PSPV, presidida por Diego Macià, fracasó ayer en su intento de proponer un nuevo portavoz parlamentario en sustitución del dimitido Antoni Asunción. Tras una semana de conversaciones, la mayoría de la gestora del PSPV se rebeló contra la última propuesta de su presidente, Diego Macià, que abogaba por avalar para el cargo al alcalde de Morella, Ximo Puig, uno de los dos candidatos del sector renovador. Las dificultades para realizar una propuesta por parte de la gestora aumentaron al hablar de los portavoces adjuntos y de la posibilidad de removerlos.

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La dirección provisional del PSPV, presidida por Diego Macià, fracasó ayer en su intento de proponer un nuevo portavoz parlamentario en sustitución del dimitido Antoni Asunción. Tras una semana de conversaciones, la mayoría de la gestora del PSPV se rebeló contra la última propuesta de su presidente, Diego Macià, que abogaba por avalar para el cargo al alcalde de Morella, Ximo Puig, uno de los dos candidatos del sector renovador. Las dificultades para realizar una propuesta por parte de la gestora aumentaron al hablar de los portavoces adjuntos y de la posibilidad de removerlos.

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Una semana de conversaciones y reuniones no fueron suficientes para que la dirección provisional de los socialistas valencianos formulase una propuesta de dirección de grupo parlamentario con mínimas garantías de éxito. El presidente de la dirección provisional de los socialistas valencianos, Diego Macià, intentó a última hora de ayer convencer a su equipo de que aceptase a Puig como portavoz parlamentario. Sin embargo, la propuesta decayó por la negativa de su equipo de confianza -la vicepresidenta Empar Navarro, el portavoz Jorge Alarte, el responsable de Organización, Francesc Romeu, y el de Finanzas, Francisco Ruiz- y las dificultades para reordenar el resto de puestos que integran la dirección del grupo parlamentario. La dirección provisional abogó por excluir a Andrés Perelló, actual portavoz adjunto segundo, que se había postulado como portavoz en las últimas horas. Los renovadores del ex secretario general Joan Ignasi Pla se opusieron a la existencia de vetos y reclamaron, además, la posibilidad de que Puig pudiese contar en una dirección de grupo ampliada con el alcalde de Alcoy, Josep Sanus, como hombre de confianza. Por su parte, Diego Macià intentó, además de mantener la propuesta de Puig, incluir como portavoz adjunto a uno de sus hombres de confianza, el diputado ilicitano Antonio Torres. El conflicto de intereses fue insuperable. Ultimar el acuerdo El portavoz oficial de la dirección provisional del PSPV y alcalde de Alaquàs, Jorge Alarte, reconoció: "La gestora está ultimando el acuerdo y no ha cerrado la propuesta de dirección del grupo parlamentario". "Creo que mañana [por hoy] o como mucho el miércoles vamos a cerrar el problema. No hay ningún nombre descartado pero se necesita más diálogo y más discusión", sentenció Alarte, que afirmó: "Estamos reflexionando sobre la dirección en su conjunto". La última propuesta de Diego Macià al núcleo duro de su gestora se produjo después de que los candidatos favoritos de la dirección provisional declinasen la oferta. El presidente de la gestora no consiguió convencer al vicepresidente segundo de la Mesa, Antonio Moreno, para que abandonase su puesto para asumir la tarea de contrincante parlamentario del popular Eduardo Zaplana. La segunda propuesta avalada por Macià, que corriese la bancada para que la primera portavoz adjunta, Cristina Moreno, cubriese la vacante de Antoni Asunción, también fue descartada. Cristina Moreno renunció definitivamente ayer a postularse para el cargo tras conocer que su compañero y portavoz segundo adjunto, Andrés Perelló, estaba dispuesto a presentar su candidatura. El candidato propuesto por los renovadores de Joan Ignasi Pla y alcalde de Alcoy, Josep Sanus, también fue descartado por la dirección provisional. Finalmente, el otro candidato de los renovadores y alcalde de Morella, Ximo Puig, se encontró con el rechazo de la mayoría de la gestora -pese al intento inicial de Diego Macià- y los intereses contrapuestos de las distintas familias en la remodelación del resto de puestos de la dirección parlamentaria. Los intentos negociadores de última hora, que llevaron a Joan Lerma y a Joan Ignasi Pla a reunirse con varios diputados en el grupo socialista de las Cortes Valencianas durante la mañana de ayer, y las llamadas personales a los parlamentarios realizadas por la dirección provisional del PSPV no arrojaron ningún fruto. Al contrario, los descartes realizados por la gestora del PSPV en las negociaciones para proponer una nueva dirección de grupo parlamentario -y también para preparar la candidatura a la presidencia del Consell Metropolità de l"Horta- crearon gran malestar y fueron interpretados por los integrantes de la refundada plataforma Movimiento para el Cambio -compuesta básicamente por asuncionistas y la corriente Izquierda Socialista- como "una señal inequívoca" de que la gestora pretende laminar a los sectores críticos con la labor del secretario federal de Organización, Ciprià Ciscar.

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