Asegurada una plaza en la Copa Ryder
El campeonato de la PGA le dejó a Sergio García un botín jugoso. Por de pronto, su segunda posición le garantiza una plaza en el equipo europeo que disputará la Copa Ryder el próximo mes en Brookline, en las afueras de Boston.Ganarse ese derecho se había convertido en un objetivo prioritario, en función del cual se había preparado su propio calendario, con torneos por Europa hasta asegurarse el puesto. La semana que viene iba a jugar en Alemania, por ejemplo, pero ya no. Ahora se queda por Estados Unidos, a prepararse jugando en el circuito americano, el que más le gusta.
Pero no sólo e...
El campeonato de la PGA le dejó a Sergio García un botín jugoso. Por de pronto, su segunda posición le garantiza una plaza en el equipo europeo que disputará la Copa Ryder el próximo mes en Brookline, en las afueras de Boston.Ganarse ese derecho se había convertido en un objetivo prioritario, en función del cual se había preparado su propio calendario, con torneos por Europa hasta asegurarse el puesto. La semana que viene iba a jugar en Alemania, por ejemplo, pero ya no. Ahora se queda por Estados Unidos, a prepararse jugando en el circuito americano, el que más le gusta.
Pero no sólo es la plaza en la Copa Ryder lo que ha ganado Sergio. Cuando empezó como profesional, hace tan sólo cuatro meses y medio, el golfista castellonense estaba por detrás del número 400. Ahora, tras su prodigiosa actuación, se ha colado entre los 20 primeros. En ese tiempo, Sergio ha conseguido la victoria en el abierto de Irlanda, un segundo puesto en el de Escocia y un tercero en el Byron Nelson, en Dallas. Y ayer, la segunda plaza en el Campeonato de la PGA.
Después de su frustrante actuación en el Abierto Británico y su buen hacer ahora en el torneo estadounidense, son numerosas las opiniones que sitúan al jugador español en la órbita del circuito norteamericano, menos rudo en algunos aspectos que el europeo, sobre todo en lo que se refiere a los campos. García guarda silencio, pero las posibilidades de instalarse en el circuito estadounidense son muy altas.