Demoras en la mitad de los vuelos en el día de más tráfico del año en Barajas

El aeropuerto de Madrid-Barajas registró ayer retrasos en la mitad de los vuelos, con 22 minutos de demora como media a las cinco de la tarde, hora en la que AENA dejó de facilitar datos. La jornada de ayer, con 968 operaciones, supuso un récord en el aeródromo madrileño, aunque están por llegar los días de mayor tráfico aéreo que suelen coincidir con el regreso de las vacaciones a finales de julio y agosto. Por otra parte, el director de Navegación Aérea, Gaspar de Vicente, y el presidente del sindicato de controladores, Juan María García Gil, firmaron ayer el acuerdo que permitirá "salvar" e...

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El aeropuerto de Madrid-Barajas registró ayer retrasos en la mitad de los vuelos, con 22 minutos de demora como media a las cinco de la tarde, hora en la que AENA dejó de facilitar datos. La jornada de ayer, con 968 operaciones, supuso un récord en el aeródromo madrileño, aunque están por llegar los días de mayor tráfico aéreo que suelen coincidir con el regreso de las vacaciones a finales de julio y agosto. Por otra parte, el director de Navegación Aérea, Gaspar de Vicente, y el presidente del sindicato de controladores, Juan María García Gil, firmaron ayer el acuerdo que permitirá "salvar" el verano.

Los principales aeropuertos españoles continuaron ayer acumulando retrasos, aunque el día fue menos problemático que durante el fin de semana. El retraso medio del aeropuerto de Madrid-Barajas era de 22 minutos a las 17.00, en la jornada de mayor tráfico aéreo del año en la que operaron 968 vuelos. Las causas de los retrasos, según fuentes del aeropuerto, se atribuyeron a restricciones en el espacio aéreo europeo, a lo que se sumó la configuración sur de Barajas, que obliga a los aviones a despegar en contra del viento. Los retrasos afectaron al 48% de los vuelos, en un día en el que la escasa información que facilita AENA se redujo a cero a partir de primera hora de la tarde. El gabinete de AENA en Barajas no ofreció los datos de las 18.00, ni de las 20.00 debido a "motivos desconocidos", según un portavoz del aeródromo madrileño.

En Barcelona, el aeropuerto de El Prat vivió, en términos generales, una situación de normalidad. El índice de puntualidad se situaba a las tres de la tarde en el 65%, un porcentaje que se encuentra dentro de los márgenes -entre el 60% y el 70%- que el ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, dio como buenos para este verano. A las cinco de la tarde, el retraso medio era de 15 minutos. Las demoras afectaron especialmente a los vuelos con destino al norte de Europa y los países mediterráneos y no tanto a las operaciones nacionales. Los responsables del aeródromo atribuyeron también los retrasos a las restricciones en los espacios aéreos de Francia, Italia y Suiza, informa Manel Torres.

El director de Navegación Aérea, Gaspar de Vicente, recordó la situación de "congestión de tráfico aéreo generalizada en Europa" afecta a España. Él mismo facilitó los datos de las 13.00 y señaló que en un ""día punta" como el de ayer, los índices de puntualidad estuvieron "dentro de norma". Hasta las 15,00 horas, la demora media en Barajas en las salidas fue de cinco minutos y de dos en las llegadas, lo que ha permitido que el retraso del 86% de las salidas y el 94%de las llegadas fuese de 15 minutos. Agregó que "aunque habrá problemas" el objetivo es que la puntualidad supere la media europea. Por su parte, el presidente del sindicato de controladores, Juan María García Gil, afirmó que el acuerdo ayudará a "salvar" el verano, pero que nadie "pida la puntualidad exacta de un avión porque no existe".

Firma del acuerdo

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De Vicente y García Gil firmaron ayer el acuerdo que alcanzaron el martes 29 de junio para permitir mayor operatividad de los centros de control aéreo. Según el acuerdo, los controladores renuncian a sus días de asuntos propios y a disfrutar de las vacaciones fuera del verano. Además aceptarán la ampliación de horas extraordinarias, por las que cobrarán entre 8.000 y 15.000 pesetas. Estas medidas son voluntarias. García Gil anunció que en septiembre comenzarán las conversaciones con AENA para que el 1 de enero del 2000 "exista un planing" que evite problemas como los de este año.

Para "motivar" a los controladores, en palabras del director de Navegación Aérea, AENA diseñará un "plan de objetivos de calidad que cumplir" durante este verano a cambio del cual otorgará "ventajas de carácter social", que incluyen un seguro médico y de vida, cuya cuantía aún no está fijada. En la actualidad, los controladores realizan 1.524 horas anuales (1.200 horas de jornada laboral, las 224 que se ampliaron en el primer convenio colectivo, y 100 horas en las que el controlador ha de estar disponible ante una posible urgencia).

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