A NIEMEYER NO LE GUSTA LA LÍNEA RECTA

A Oscar Niemeyer, ideador de la ciudad de Brasilia como nueva capital de Brasil, no le gusta la línea recta. A sus 91 años cumplidos, este arquitecto de los más geniales del mundo, comunista convencido, con 400 proyectos realizados y 180 edificios construidos fuera de Brasil, y sobre el que se han escrito más de 30 libros, afirma que la línea recta es "dura, inflexible, creada por el hombre". Lo que le atrae, dice, es "la línea curva, libre, sensual, la que encuentro en las montañas de mi país, en el curso sinuoso de los ríos, en las olas del mar, en el cuerpo de la mujer preferida". De...

A Oscar Niemeyer, ideador de la ciudad de Brasilia como nueva capital de Brasil, no le gusta la línea recta. A sus 91 años cumplidos, este arquitecto de los más geniales del mundo, comunista convencido, con 400 proyectos realizados y 180 edificios construidos fuera de Brasil, y sobre el que se han escrito más de 30 libros, afirma que la línea recta es "dura, inflexible, creada por el hombre". Lo que le atrae, dice, es "la línea curva, libre, sensual, la que encuentro en las montañas de mi país, en el curso sinuoso de los ríos, en las olas del mar, en el cuerpo de la mujer preferida". De él decía Le Corbusier en 1936: "Ese joven tiene las montañas de Río de Janeiro en sus ojos". Cumplir 90 años, dice, "es una mierda, pero es bueno al mismo tiempo". Dice que se avergonzaría de ser rico y que lo único que vale la pena en la vida es estar a gusto con los amigos, porque, "la vida es perversa, sin solución". -