El grupo Sáez Merino destina el 20% de sus exportaciones a Japón

Japón se ha convertido en uno de los principales mercados para la sociedad textil Sáez Merino, que comercializa las marcas Lois, Caroche y Cimarrón. La firma, que el año pasado exportó el 55% de su producción, destinó un 20% del total en el archipiélago nipón. Japón y Europa son en la actualidad los principales países clientes de la compañía de confección, que dirige Vicente Sáez-Merino. "1998 ha sido un año excepcionalmente bueno. Un ejercicio récord en facturación, beneficios y exportación", manifestó ayer el director general, que presentó en Valencia los resultados del último ejercicio. La...

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Japón se ha convertido en uno de los principales mercados para la sociedad textil Sáez Merino, que comercializa las marcas Lois, Caroche y Cimarrón. La firma, que el año pasado exportó el 55% de su producción, destinó un 20% del total en el archipiélago nipón. Japón y Europa son en la actualidad los principales países clientes de la compañía de confección, que dirige Vicente Sáez-Merino. "1998 ha sido un año excepcionalmente bueno. Un ejercicio récord en facturación, beneficios y exportación", manifestó ayer el director general, que presentó en Valencia los resultados del último ejercicio. La textil facturó el año pasado cerca de 19.000 millones de pesetas, 2.000 más que el año anterior, y obtuvo unos beneficios de 2.186 millones, lo que representa un crecimiento del 68% en relación a 1997. El cash-flow se situó en 2.710 millones de pesetas, con un incremento sobre el ejercicio anterior del 49%. En cuanto a las exportaciones, valoradas en 10.400 millones de pesetas, éstas crecieron un 31%. Según el director general, Sáez Merino "es un grupo que realiza todo el proceso textil, desde la fabricación del tejido hasta la confección de la prenda". "Lo único que no tenemos son tiendas exclusivas para distribuir nuestras marcas", aclaró Vicente Sáez, quien repitió, una vez más, que la firma se está preparando "todavía" para ello. El directivo anunció además que la textil pronto tendrá un protocolo de familia por el que regirse y reiteró que no existen, hoy por hoy, planes para salir a bolsa. De la facturación total del grupo Sáez Merino, compuesto por un conglomerado de nueve sociedades, el 77% es confección y el 23% restante tejidos. La división de confección, que cuenta con fábricas en Benaguacil, Carcaixent, Torrent, Casas Ibáñez, Daimiel y Ayora, produjo el año pasado cerca de cuatro millones de prendas. Otras 800.000 prendas fueron subcontratadas a talleres externos. La división textil, especializada en la fabricación de tejidos -índigos, sargas, panas, algodones, etcétera-, tiene sus principales centros de trabajo en Cheste y Segorbe. Ambas factorías ocupan 10.000 metros cuadrados, producen 29 millones de metros cuadrados de tejido y 4.500 toneladas de hilatura. La mayor parte de esta producción se destina al autoconsumo y el resto se exporta. Sáez Merino, con 1.562 empleados de media anual, la crearon en 1952 el padre y tío del actual director general del grupo textil. En 1977, los fundadores Manuel y Joaquín Sáez Merino deslindaron sus negocios, creándose Textiles y Confecciones Europeas (Tycesa). El grupo Sáez Merino, que dirige desde entonces la familia de Manuel, tiene, después de varias ampliaciones de capital, 4.365 millones de pesetas de capital social.

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