ATLETISMO

Africanos y residentes en España

Hace años que el atletismo africano se ha extendido por el mundo profesional de las carreras. Los tres representantes más importantes de atletas españoles, Miguel Ángel Mostaza, José Alonso Valero y Julia García gestionan desde Madrid, cobrándoles un porcentaje de los premios, la participación de una decena de corredores africanos. Miguel sólo tiene actualmente un keniano, Moiwen, que ha ganado varias carreras en Portugal y los 10.000 metros de Oslo, aunque fue descalificado por un problema de publicidad. Julia se ha inclinado por la variante etíope, con dos hombres y dos mujeres, y José por u...

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Hace años que el atletismo africano se ha extendido por el mundo profesional de las carreras. Los tres representantes más importantes de atletas españoles, Miguel Ángel Mostaza, José Alonso Valero y Julia García gestionan desde Madrid, cobrándoles un porcentaje de los premios, la participación de una decena de corredores africanos. Miguel sólo tiene actualmente un keniano, Moiwen, que ha ganado varias carreras en Portugal y los 10.000 metros de Oslo, aunque fue descalificado por un problema de publicidad. Julia se ha inclinado por la variante etíope, con dos hombres y dos mujeres, y José por una mezcla de cinco tanzanos y kenianos. Julia también tiene un grupo de nigerianos en Valencia, velocistas en su mayoría, entre ellos la vallista Gloria Alozie, gran revelación mundial de la temporada.Los madrileños residen en dos pisos cerca de la Casa de Campo. Entre los etíopes, una de las mujeres, Gennet Georgis, ha sido la reciente ganadora del Cross de la Constitución, en Alcobendas. "Vienen a mediados de noviembre y están hasta finales de enero o primeros de febrero para la temporada de cross", dicen tanto Julia como José, y "luego", añade Julia, "vuelven en marzo, abril y mayo, ya para la carretera". José incluso ha llevado ya dos veces a los Mundiales de cross al equipo de Tanzania, cuyas posibilidades económicas son mucho más escasas. "Pero es interesante para los organizadores que corran mundialistas. Y el tenerles aquí reunidos sirve para abaratar costes", comenta José. "Así se pueden subir los premios para los españoles. Ellos ganan dinero, pero la estancia les supone un coste muy grande. Su vida es como la de tantos emigrantes: tratan de ahorrar lo más posible. Para ellos, la comida, por ejemplo, aquí es carísima en comparación con su país. Yo les traigo poniéndoles un billete en Nairobi o Dar-es-Salaam y les organizo la agenda de competiciones". Labores como las suyas contribuyen a la promoción del atletismo africano.

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