CRAXI, ARTISTA
La justicia italiana le persigue desde hace cuatro años y los tribunales le han condenado ya a penas que totalizan 24 años de cárcel en sucesivos juicios celebrados en su ausencia, pero nada ha podido impedir que Bettino Craxi, ex primer ministro italiano, que gobernó el país entre 1983 y 1987, exponga en Roma sus obras de arte. Desde ayer, día de la inauguración oficial, hasta diciembre próximo, la galería Bianco Oro, situada a un paso de la Piazza del Popolo, en el corazón de la capital italiana, expone una pequeña muestra de litografías y cerámicas realizada por el ex secretario gene...
La justicia italiana le persigue desde hace cuatro años y los tribunales le han condenado ya a penas que totalizan 24 años de cárcel en sucesivos juicios celebrados en su ausencia, pero nada ha podido impedir que Bettino Craxi, ex primer ministro italiano, que gobernó el país entre 1983 y 1987, exponga en Roma sus obras de arte. Desde ayer, día de la inauguración oficial, hasta diciembre próximo, la galería Bianco Oro, situada a un paso de la Piazza del Popolo, en el corazón de la capital italiana, expone una pequeña muestra de litografías y cerámicas realizada por el ex secretario general del Partido Socialista Italiano. Mi Africa: obras de 1994 a 1998, está integrada por media docena de cerámicas, pintadas con los colores de la bandera italiana (rojo, verde y blanco) y elocuentemente tituladas Lágrimas de Italia, un puñado de litografías con imágenes de la vida cotidiana del Túnez de principios de siglo hechas sobre viejas placas de Louis Lumiere, -el creador del cinematógrafo- que Craxi encontró hace años perdidas en un mercadillo de París y una serie de reproducciones de anuncios de una marca de cigarrillos franceses de principios de siglo, que muestran deslumbrantes mujeres argelinas semidesnudas. "Esta exposición se organiza sólo para ser vista, no para ser vendida", comentaba ayer el pintor italiano amigo de Craxi, Andrea Picini, al que pertenecen las obras "conceptuales", según los críticos italianos, del ex mandatario aplastado por el escándalo de corrupción política y financiera conocido como Tangentópoli. La lista de invitados a la inauguración incluía a los principales nombres de la política actual italiana aunque, era improbable la presencia del autor, exiliado en Hamamet (Túnez) desde 1994. "Quién sabe", señalaba con un tono casi misterioso Roberto Panico, dueño de la Bianco Oro, "Alá puede hacer milagros".- ,