Detenido el presunto violador de dos ancianas, convicto de delitos similares
José Ignacio Orduña fue juzgado en 1979 acusado de terribles crímenes: siete violaciones, la mayoría a ancianas, los asesinatos de dos hermanas de avanzada edad, a las que agredió sexualmente, y el homicidio de una mujer de 66 años, a la que también violó. Confeso y convicto de estos infamantes delitos y de otros de lesiones graves y robo asociados a los anteriores, Orduña, que en la actualidad tiene 45 años, ingresó en prisión para cumplir una condena de 86 años. Desde el año pasado está en la calle. El pasado mes de julio fue detenido acusado por la policía de la violación y lesiones a otras...
José Ignacio Orduña fue juzgado en 1979 acusado de terribles crímenes: siete violaciones, la mayoría a ancianas, los asesinatos de dos hermanas de avanzada edad, a las que agredió sexualmente, y el homicidio de una mujer de 66 años, a la que también violó. Confeso y convicto de estos infamantes delitos y de otros de lesiones graves y robo asociados a los anteriores, Orduña, que en la actualidad tiene 45 años, ingresó en prisión para cumplir una condena de 86 años. Desde el año pasado está en la calle. El pasado mes de julio fue detenido acusado por la policía de la violación y lesiones a otras dos ancianas en Barcelona. Orduña, un hombre calificado de "educado y frío" por los agentes del Grupo de Delitos contra la Libertad Sexual de la Policía Nacional que le arrestaron, está soltero, no trabajaba y vivía con su familia en un barrio obrero de Barcelona. Conocido hace 20 años como el asesino de Lesseps -en esta zona de Barcelona estaba el piso donde Orduña violó y asesinó a las dos ancianas-, vio rebajada su condena a 86 años porque el juez apreció la eximente incompleta de enfermedad mental. Tanto hace 20 años como el pasado verano, Orduña llevaba a la práctica su psicótica gerontofilia siempre de la misma manera: detectaba a una anciana solitaria por las calles de Barcelona; la seguía hasta su casa; y, a la fuerza, entraba en el piso; allí, la golpeaba brutalmente; la violaba; y le robaba los objetos de valor. El pasado 18 de julio, una mujer mayor denunció en una comisaría de Barcelona que un individuo la había seguido y sorprendido en su domicilio. Añadió que la había violado tras golpearla con saña. El 29 del mismo mes, otra mujer de provecta edad se personaba en otra comisaría y explicaba la misma historia. Los agentes del Grupo de Delitos contra la Libertad Sexual fueron directamente a sus archivos. Allí se toparon con Orduña. Vieron que estaba en la calle, libre. Las víctimas lo identificaron por fotografía. Los policías le localizaron y el 1 de agosto le pusieron a disposición del juez. La policía cree que pueden haber más casos de violación de ancianas.