El juez decano de Barcelona descarta a corto plazo los "juicios inmediatos"

El juez decano de Barcelona, Joaquín Bayo, descartó ayer la implantación a corto plazo de los denominados juicios inmediatos, por considerar que no son operativos y que sería necesaria una modificación de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. El proyecto inicial preveía con ese sistema juzgar a un detenido el mismo día de su detención si se conformaba con la pena solicitada por el fiscal y siempre que se tratase de delitos menores, como robos o el pequeño tráfico de drogas El inmediato antecesor de Bayo en el cargo, Santiago Torres, llegó incluso a fijar una fecha de entrada en vigor de este nue...

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El juez decano de Barcelona, Joaquín Bayo, descartó ayer la implantación a corto plazo de los denominados juicios inmediatos, por considerar que no son operativos y que sería necesaria una modificación de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. El proyecto inicial preveía con ese sistema juzgar a un detenido el mismo día de su detención si se conformaba con la pena solicitada por el fiscal y siempre que se tratase de delitos menores, como robos o el pequeño tráfico de drogas El inmediato antecesor de Bayo en el cargo, Santiago Torres, llegó incluso a fijar una fecha de entrada en vigor de este nuevo sistema de justicia, pero ayer, en declaraciones a la emisora Catalunya Ràdio, Bayo lo descartó a corto plazo. Fuentes de la fiscalía también señalaron ayer que con la actual ley "no es rentable" este sistema de justicia porque implicaría que un juzgado penal, de los 24 que existen en Barcelona, estuviese de guardia cada día, con el consiguiente gasto de personal e infraestructura que ello supone. Bayo declaró que tanto la junta de jueces como la fiscalía descartan por ahora el sistema y que mientras no se modifique la ley "no vale la pena ponerlos en marcha porque no serían operativos", aunque agregó: "No tiramos la toalla definitivamente". El decano considera que "si sólo se aplica este sistema a las conformidades de la pena (por parte del acusado), que también se pueden dar por los juicios rápidos en 15 días, tampoco se experimenta una mejora sustancial". Además, la implantación de este sistema comportaría una revisión de los mecanismos judiciales para garantizar el derecho de defensa de los detenidos y la práctica de la prueba con garantías.

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