Los cantautores toman la escena
La jornada comienza pronto, a eso de las 18.00 horas, y concluye cuando la luz empieza a arrinconar la noche. Como en un viaje con decenas de estaciones, el Mercat de Música Viva de Vic concluyó el viernes su primera jornada completa, y las primeras caras de cansancio ya fueron visibles en el recinto de la feria profesional, donde las gafas de sol comenzaron a imponer su presencia. Este adminículo es uno de los barómetros del Mercat, cuyo seguimiento completo lo hace preciso para disimular las ojeras provocadas por semejante maratón de música y trajín. No es para menos, ya que entre las 18.0...
La jornada comienza pronto, a eso de las 18.00 horas, y concluye cuando la luz empieza a arrinconar la noche. Como en un viaje con decenas de estaciones, el Mercat de Música Viva de Vic concluyó el viernes su primera jornada completa, y las primeras caras de cansancio ya fueron visibles en el recinto de la feria profesional, donde las gafas de sol comenzaron a imponer su presencia. Este adminículo es uno de los barómetros del Mercat, cuyo seguimiento completo lo hace preciso para disimular las ojeras provocadas por semejante maratón de música y trajín. No es para menos, ya que entre las 18.00 y las 5.00 horas no hay apenas un momento de descanso en una ciudad volcada en la música. Aunque, todo sea dicho, las cifras de asistencia a los espectáculos del primer día no parecieron en algunos casos y a simple vista tan elevadas como en ediciones precedentes, cosa que tampoco es negativa en sí misma. Eso sí, fue llamativo el escaso eco de la sesión techno, que apenas logró convocar a 500 personas en una carpa con capacidad para más de 2.000. Sin duda y tal y como reconoció Carles Sala, director del certamen, el techno ha de ser resituado en el Mercat a fin de encontrarle un espacio que no resulte desmesurado y que se ajuste a la demanda de un público que el viernes brilló literalmente por su ausencia. Mejor suerte tuvieron los grupos que actuaron en el escenario de la plaza mayor, un recinto que ofreció nombres populares del pop-rock en catalán junto a la gratuidad de la entrada. Una multitud de jóvenes difícilmente cuantificable siguió allí las actuaciones de Glaucs, Gossos y Ja T"ho Diré, bandas que despacharon unos conciertos caracterizados por su impacto popular. Menos populares, pero con sobrados argumentos artísticos, son los nombres de Petisme, Jabier Muguruza o Gabriel Sopeña, cantautores de nuevo cuño que también pasaron por Vic dejando marca. Entre otras cosas, esta edición del Mercat está dando oportunidad a que artistas sin demasiado reclamo demuestren hasta qué punto tienen un espacio en la escena musical del país. Éste es el caso de Paul Fuster, un verdadero personaje con un discurso artístico imprevisible. Situado, pongamos, en la senda de Ben Harper, este norteamericano afincado en Cardona dará que hablar. Sólo falta saber si será por su música o por las repercusiones mediáticas del personaje alucinado que está filtrando en los medios de comunicación. Amén de su concierto, Fuster fue también invitado de Gossos en la plaza mayor, donde participó cantando la versión que hacen los de Manresa del Helplessly hopping. Siguiendo la ruta cantautoril, habría que hacer parada en la presentación que ya ayer se realizó en el Mercat del disco-libro Cántame mis canciones, un homenaje a Jackson Browne por parte de 16 artistas del país. Con un Browne un tanto atónito, gran parte de los intérpretes que han revisado sus canciones loaron su figura manifestando la impronta que en ellos ha dejado. Maria del Mar Bonet, Petisme, Jabier Muguruza, Javier Mas, Remigi Palmero, Silvia Comas y Lidia Pujol y Sopeña pusieron, entre otros, su granito de arena en un acto de presentación auspiciado por Columna, responsable de la edición del disco-libro. Metidos en estas arenas, la Associació de Cantants i Intèrprets en Llengua Catalana (ACILC) presentó la cuarta edición de su circuito acústico, que entre los meses de noviembre y diciembre paseará por escenarios de Barcelona, Les Borges Blanques, Girona, Tarragona y Vic las propuestas de Joan Amèric, Joan Isaac, Kitsch, Pi de la Serra y Adrià Puntí. Y es que los cantautores piden la palabra y Vic fue su mejor escenario.