Profesores de Magisterio de centros religiosos discuten los retos del formador

Más de 325 profesores de Escuelas Universitarias de Magisterio tuteladas por la Iglesia se reunieron ayer en Sevilla para debatir los distintos desafíos con los que se encuentran a la hora de educar y enseñar dados los nuevos escenarios socioculturales actuales. La directora del Secretariado de Escuelas Universitarias de Magisterio de la Conferencia Episcopal Española, Justina Sánchez, intentó ayer resumir esos nuevos problemas que se les plantean a los profesores y el papel que deben jugar para que la escuela se convierta en el ámbito desde el que atacar la exclusión social, cultural y afecti...

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Más de 325 profesores de Escuelas Universitarias de Magisterio tuteladas por la Iglesia se reunieron ayer en Sevilla para debatir los distintos desafíos con los que se encuentran a la hora de educar y enseñar dados los nuevos escenarios socioculturales actuales. La directora del Secretariado de Escuelas Universitarias de Magisterio de la Conferencia Episcopal Española, Justina Sánchez, intentó ayer resumir esos nuevos problemas que se les plantean a los profesores y el papel que deben jugar para que la escuela se convierta en el ámbito desde el que atacar la exclusión social, cultural y afectiva que afecta a muchos alumnos: "Estamos tratando temas como la inclusión de los marginados, la educación intercultural que recoja los valores de las diferentes culturas y, en definitiva, una educación en valores." Para Sánchez, los formadores se encuentran estos días con nuevos problemas y preguntas y deben encontrar una metodología adecuada que les ayude a resolverlas. Problemas de los formadores Por eso, parte del día de hoy se dedicará a debatir e intercambiar experiencias sobre lo que han titulado El aprendizaje basado en problemas, para intentar acortar distancias "entre los formadores y los problemas reales a los que se enfrentan". Sánchez considera que la metodología apropiada para enfrentarse a estas nuevas realidades debe basarse en el trabajo en grupo y abundar en maneras participativas. El fracaso escolar, el entorno sociocultural de los alumnos y los diferentes ritmos y motivaciones de estos son algunos de los nuevos retos de los maestros, quienes deberán contar, a juicio de estos profesionales vinculados con la Iglesia, con la participación activa de los padres: "En todas las familias hay un gran interés por la formación de sus hijos pero debe haber más comunicación entre la escuela y las familias, deben dedicarle más tiempo", explicó Sánchez. La directora del Secretariado de Escuelas Universitarias de Magisterio de la Conferencia Episcopal Española dio por sentado que todas estas transformaciones se afrontan desde el marco de la Logse y bajo el espíritu del Informe Delors, un estudio a nivel europeo que aporta las nuevas directrices y señala el camino para conseguir una educación más integradora y en valores.

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