Phil Jackson dice que abandona el banquillo de Chicago Bulls
El mejor equipo de baloncesto de la década se desmorona. Pocos días después de alcanzar su sexto título de la NBA, Phil Jackson, entrenador de los Chicago Bulls, asegura en el número de la revista Newsweek que sale hoy a la venta que abandona el banquillo definitivamente. "Para mí es el perfecto final para un equipo maravilloso", declara Jackson, quien afirma que la dirección del club le ha ofrecido seguir en los últimos días. "Me entrevisté con el dueño del club, Jerry Reinsdorf y me dijo que si deseaba regresar tenía la oportunidad. Pero es tiempo de disfrutar de otras cosas", comenta el téc...
El mejor equipo de baloncesto de la década se desmorona. Pocos días después de alcanzar su sexto título de la NBA, Phil Jackson, entrenador de los Chicago Bulls, asegura en el número de la revista Newsweek que sale hoy a la venta que abandona el banquillo definitivamente. "Para mí es el perfecto final para un equipo maravilloso", declara Jackson, quien afirma que la dirección del club le ha ofrecido seguir en los últimos días. "Me entrevisté con el dueño del club, Jerry Reinsdorf y me dijo que si deseaba regresar tenía la oportunidad. Pero es tiempo de disfrutar de otras cosas", comenta el técnico. La posibilidad de una desbandada en los Bulls se afianza. Michael Jordan, el indiscutible número uno, ya ha repetido que sin Jackson al frente del equipo y sin Scottie Pippen, que busca nuevos aires, no continuará en el equipo.El entrenador que ha conseguido seis anillos de la NBA con Chicago en los últimos ocho años -las otras dos temporadas coinciden con la ausencia del famoso 23- sugiere que Jordan también debería decir adiós: "No hay duda de que puede seguir siendo un jugador efectivo en la NBA. Pero creo que no puede haber mejor momento para retirarse que después de este final [de temporada]". Jackson se refiere a los espléndidos últimos instantes del sexto partido frente a Utah Jazz, en los que Jordan robó un balón a Karl Malone y consiguió la canasta de la victoria a escasos segundos del bocinazo final.