Entrevista:

ANTONIO GIMÉNEZ PERICÁS MAGISTRADO DE LA AUDIENCIA DE BILBAO "La inmigración es un fracaso de las sociedades avanzadas"

Antonio Giménez Pericás (Madrid, 1930), magistrado de la Sección Primera de la Audiencia de Bilbao y superviviente de Jueces para la Democracia tras la crisis de los últimos meses, es uno de los juristas con más experiencia en el País Vasco: un año en Vizcaya y los 11 anteriores en Guipúzcoa. Esta semana ha participado como ponente en el curso sobre Prevención de la tortura, inmigración y actuación policial, destinado a policías, que se ha celebrado en la Academia de Arkaute. Pericás defiende una reforma de la ley de extranjería donde desaparezca la distinción entre inmigrante y refugiado. P...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Antonio Giménez Pericás (Madrid, 1930), magistrado de la Sección Primera de la Audiencia de Bilbao y superviviente de Jueces para la Democracia tras la crisis de los últimos meses, es uno de los juristas con más experiencia en el País Vasco: un año en Vizcaya y los 11 anteriores en Guipúzcoa. Esta semana ha participado como ponente en el curso sobre Prevención de la tortura, inmigración y actuación policial, destinado a policías, que se ha celebrado en la Academia de Arkaute. Pericás defiende una reforma de la ley de extranjería donde desaparezca la distinción entre inmigrante y refugiado. Pregunta. ¿En qué sentido critica la ley, cuya reforma se está estudiando en el Congreso? Respuesta. Mi crítica no es frontal, porque la regulación es necesaria en cuanto a los permisos de residencia, de trabajo, etcétera. Pero creo que debe ser superada la distinción entre las causas económicas y políticas. Además, está la cuestión de la expulsión de los extranjeros y el tiempo que deben permanecer legalmente confinados. Aunque se me puede objetar que es un problema de medios, esto atenta contra la dignidad humana. Esta ley permite situaciones como las de Melilla . También tengo que decir que no son tantos los inmigrantes que hay en el país. A mitad de los años noventa, Cáritas decía que no llegaban a 140.000 los inmigrantes legales en España, y en situación ilegal, otros 330.000. Eso es una gota de agua. ¿Qué Europa queremos hacer? Tenemos que convivir con el mestizaje. En este tema hay un montón de falacias. P. ¿Cuál es el mejor modelo para regular la nueva ley? R. No habría que salirse de los principios de la Convención Europea y del Protocolo, y después hacer una regulación que abrevie los plazos de concesión de los permisos, ver muy delicadamente -si no se puede suprimir al principio- las causas económicas y políticas que producen la distinción entre inmigrante y refugiado, estudiando las condiciones en que están los países de procedencia porque normalmente se confunden las causas. P. El curso de Arkaute va dirigido a policías y estudiantes del Instituto Vasco de Criminología. ¿Qué tienen ellos que aprender? R. Más bien sería qué tienen que olvidar. Deben olvidar las actitudes xenófobas que están en la mente de casi todos los ciudadanos y son ancestrales. La inmigración es un fracaso nuestro, de las sociedades eficientes económicamente. P. Esta semana, una sentencia de la Audiencia de Bilbao ha absuelto a tres policías acusados de participar en la violación a una inmigrante brasileña. ¿No existe en estos casos mayor benevolencia? R. No lo creo. Lo que no puede haber es un trato de favor por pertenecer a un cuerpo policial. P. ¿Y eso no ocurre? R. No conozco que se hayan pasado por encima casos de torturas. P. Usted estuvo en Guipúzcoa durante muchos años y coincidió con una etapa en que abundaron casos de estos. R. Sí. La época más delicada fue entre 1982 y 1985. Luego fue descendiendo el nivel de los casos que nos llegaban. Creo que se ha cambiado. La tortura es absolutamente innecesaria. Sabemos que en los últimos años no se han dado casos de tortura. Los últimos que se han juzgado son sumarios bastante lejanos en el tiempo. P. El que no haya más casos no implica necesariamente que se respeten los derechos humanos. R. Yo pienso que sí se respetan.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Archivado En