¿Dónde está el sumario?
La historia judicial está repleta de curiosas desapariciones de objetos, pero nadie recordaba hasta ahora que se hubiese perdido una causa judicial. Lo más curioso es que el expediente en cuestión tenía más de 5.000 folios, pesaba 11 kilos y el extravío se produjo cuando la causa salió de un juzgado de Barcelona con destino al Colegio de Abogados. El perjudicado está más que perplejo y sólo le faltaba eso para que acabase de recelar de la justicia, porque su caso se arrastra desde hace una década. El Colegio de Abogados de Barcelona, por su parte, responsabiliza a la empresa de mensajería que...
La historia judicial está repleta de curiosas desapariciones de objetos, pero nadie recordaba hasta ahora que se hubiese perdido una causa judicial. Lo más curioso es que el expediente en cuestión tenía más de 5.000 folios, pesaba 11 kilos y el extravío se produjo cuando la causa salió de un juzgado de Barcelona con destino al Colegio de Abogados. El perjudicado está más que perplejo y sólo le faltaba eso para que acabase de recelar de la justicia, porque su caso se arrastra desde hace una década. El Colegio de Abogados de Barcelona, por su parte, responsabiliza a la empresa de mensajería que hizo el traslado. El caso fue estudiado en la junta celebrada anoche y se acordó presentar una denuncia con el perjudicado ante el juzgado de guardia. La historia se remonta al 2 de diciembre de 1997, cuando el Juzgado de lo Penal número 6 notificó la tasación de las costas que había realizado el abogado de Manuel Parrado Rodríguez. Los jueces le reconocieron el derecho a ser indemnizado con 8,8 millones de pesetas por los daños y perjuicios que sufrió al ingerir unas pastillas de litio. La sentencia condenó a la compañía de seguros a abonar el dinero a Parrado, como así ocurrió, y a pagar las costas. Sin embargo, la aseguradora impugnó por excesiva la minuta de tres millones presentada por el abogado. El juzgado acordó entonces remitir la causa al Colegio de Abogados para que la comisión de honorarios emitiese un informe que jamás llegó a redactarse porque el 3 de junio se supo que la causa había desaparecido. El vicedecano del Colegio de Abogados, Joan Maria Xiol, explicó ayer: "Creo que el expediente no llegó a entrar aquí". Parrado asegura que todavía están pendientes de cobrar 400.000 pesetas en concepto de intereses y que mientras no aparezca la causa el juzgado asegura que no podrá percibirlas. El Colegio de Abogados cree que todo se arreglará.