Dirigentes del PSC rechazan a Nadal como "número dos" de Maragall

Joaquim Nadal no encontrará libre de obstáculos el camino para convertirse en el número dos del socialista Pasqual Maragall en la próxima pugna electoral por la presidencia de la Generalitat. Maragall aún no ha hecho oficial su candidatura, pero algunos dirigentes de su partido ya han empezado a desautorizar a Nadal, cuya actuación como jefe de la oposición en el Parlament consideran deficiente. Estos dirigentes, mayoritariamente concentrados en la federación de Barcelona del PSC, proponen que Maragall se busque otro número dos "con mayor potencial político".

La federación barcelonesa d...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Joaquim Nadal no encontrará libre de obstáculos el camino para convertirse en el número dos del socialista Pasqual Maragall en la próxima pugna electoral por la presidencia de la Generalitat. Maragall aún no ha hecho oficial su candidatura, pero algunos dirigentes de su partido ya han empezado a desautorizar a Nadal, cuya actuación como jefe de la oposición en el Parlament consideran deficiente. Estos dirigentes, mayoritariamente concentrados en la federación de Barcelona del PSC, proponen que Maragall se busque otro número dos "con mayor potencial político".

La federación barcelonesa del PSC, la de mayor envergadura del partido, reúne a la mayoría de los cuadros socialistas que opinan que Nadal no es la persona indicada para formar ticket electoral con Maragall frente al nacionalista Jordi Pujol. Este criterio, que no ha sido debatido formalmente en ningún órgano del PSC ni de su federación de Barcelona, sí ha sido expresado en privado por destacados capitanes territoriales socialistas, según fuentes del PSC de Barcelona y de la dirección nacional del partido que exigieron el anonimato. Los detractores de Nadal consideran que éste "no ha sabido ocupar el espacio político ni aprovechar la proyección pública" que le brinda su condición de líder de la oposición al Gobierno nacionalista de Pujol desde las últimas elecciones autonómicas, en 1995. En aquella ocasión, Nadal concurrió a las urnas como candidato del PSC a la presidencia de la Generalitat. Estos cuadros socialistas acusan a Nadal de haber hecho "dejación" de su liderazgo parlamentario. También le reprochan las muchas veces que apremió en público al PSC a que aclarase si él iba a repetir o no como candidato, así como sus recientes declaraciones periodísticas en las que apostaba por formar tándem electoral con Maragall y se postulaba como conseller en cap de un hipotético Gobierno catalán presidido por el ex alcalde socialista de Barcelona. En la misma lista de reproches, sus detractores se declaran decepcionados por la política de oposición desarrollada por Nadal frente a Pujol. "Pensábamos que Nadal sería más incisivo en el Parlament frente a CiU, pero no ha sido así. Nadal incluso ha llegado a echarle un capote en público a Pujol cuando José Borrell acusó recientemente al líder de CiU de mantener actitudes propias de regímenes totalitarios". "Nadal tuvo su oportunidad y la desperdició", concluyen sus contrarios. Otras fuentes de la dirección del PSC coinciden en calificar de "insatisfactorio" el trabajo de Nadal, pero apuntan que eso en parte es consecuencia de la precariedad de apoyos que el líder parlamentario ha encontrado dentro de su propio partido. El secretario de organización del PSC, José Montilla, defendió ayer la posición de Nadal argumentando que, sin contar a José Borrell, Maragall es el socialista catalán mejor colocado en las encuestas, seguido por Nadal. Montilla pronosticó que habrá ticket Maragall-Nadal, aunque subrayó que en este punto será determinante la opinión del candidato. Este periódico intentó ayer sin éxito conocer la opinión de Nadal al respecto.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En