Un duelo épico por tradición
Los goles y la pasión marcan los partidos entre azulgrana y rojiblancos
La Liga tiene un clásico (Madrid-Barça), varios derbis (Barça-Espanyol, Madrid-Atlético, Betis-Sevilla, Athletic-Real) y, de una parte a este tiempo, un duelo apasionante y único, el que enfrenta al Barcelona y al Atlético. El encuentro de hoy en el Camp Nou viene avalado por los precedentes. Los Barça-Atlético recientes han dejado huella por la cantidad de goles, la pasión, las incidencias -expulsiones- y las jugadas dignas de figurar en la colección del museo contemporáneo del fútbol español."Es difícil sacar conclusiones de un partido así. ¡Fue una locura!", dijo Van Gaal la p...
La Liga tiene un clásico (Madrid-Barça), varios derbis (Barça-Espanyol, Madrid-Atlético, Betis-Sevilla, Athletic-Real) y, de una parte a este tiempo, un duelo apasionante y único, el que enfrenta al Barcelona y al Atlético. El encuentro de hoy en el Camp Nou viene avalado por los precedentes. Los Barça-Atlético recientes han dejado huella por la cantidad de goles, la pasión, las incidencias -expulsiones- y las jugadas dignas de figurar en la colección del museo contemporáneo del fútbol español."Es difícil sacar conclusiones de un partido así. ¡Fue una locura!", dijo Van Gaal la pasada temporada tras presenciar el famoso 5-4 de Copa en el Camp Nou. Entonces Van Gaal era todavía técnico del Ajax. El primer contacto del entrenador holandés con un Barça-Atlético bastó para que dedujera la electricidad que conlleva un encuentro entre estos dos equipos.
Basta observar la media de los goles y compararla con las de otros duelos estelares como los Real Madrid-Barça o los Atlético-Real Madrid para constatar el factor diferencial. El balance goleador es concluyente: 97 tantos se contabilizan en los 19 últimos partidos entre el Barça y el Atlético, mientras que los 19 últimos Barça-Madrid registran 56 goles.
Pero, además de los goles, los Barça-Atlético dan para vanos capítulos legendarios. El 5-4 copero de marzo pasado fue comparado por Fabio Capello con el Italia-Alemania de las semifinales del Mundial de México en 1970 (4-3 para Italia después de una prórroga). A la posteridad ha pasado el gol de vaselina que logró Romario en marzo de 1994 o la maniobra de Caminero ante Nadal con un pase de la muerte a Roberto en abril de 1996 o el regate de Ronaldo a Geli en agosto de 1996 o la remontada del Atlético en la temporada 1993-1994 cuando se fue al descanso con un 0-3 con tres tantos de Romario para acabar logrando un 4-3, con gol de Caminero al filo del pitido final.