Las peñas se manifiestan contra Roig

Después de mucho tiempo de pasividad y paciencia franciscana, el valencianismo ha decidido pasar a la acción, cansado de la permanente crisis de su equipo desde hace un par de años. Un grupo de las peñas más significativas (Yomus, Gol Gran, Arrós Caldós y Luna de Valencia, entre otras) se concentra hoy a las 15.00 horas en los aledaños de Mestalla, antes del partido ante el Salamanca, para exigir la marcha del actual Consejo de Administración presidido por Francisco Roig.Tras intentar sin éxito durante la semana desactivar la convocatoria, el presidente calificó ayer la protesta de "barbaridad...

Después de mucho tiempo de pasividad y paciencia franciscana, el valencianismo ha decidido pasar a la acción, cansado de la permanente crisis de su equipo desde hace un par de años. Un grupo de las peñas más significativas (Yomus, Gol Gran, Arrós Caldós y Luna de Valencia, entre otras) se concentra hoy a las 15.00 horas en los aledaños de Mestalla, antes del partido ante el Salamanca, para exigir la marcha del actual Consejo de Administración presidido por Francisco Roig.Tras intentar sin éxito durante la semana desactivar la convocatoria, el presidente calificó ayer la protesta de "barbaridad" y adujo posibles problemas de orden público. La protesta contra Roig va acompañada por una convocatoria de queja contra los árbitros, en lo que se entiende como una división de las peñas valencianistas: entre las que acusan de la mala campana del equipo a Roig y las que se lo imputan al estamento arbitral. En cualquier casó, los representantes de ambas convocatorias han asegurado el carácter pacífico de las mismas.

Roig afronta el peor momento desde que accediera a la presidencia (en marzo de 1994). Sabe que se abrió la veda hace dos semanas, cuando, en el choque ante el Betis, el estadio le pidió al presidente su marcha en un canto que probablemente se repetirá hoy ("Paco vete ya, Paco vete ya, Paco vete ya"). El acoso al dirigente se completa con la demanda que ha planteado la Fundación del club contra la última ampliación de capital, y en la que, según un informe de la Universidad, Roig se valió de testaferros para acumular acciones.

A juicio de la Fundación, Roig vulneró el espíritu de la ampliación, puesto que ésta establecía un tope de compra de nueve títulos para evitar la concentración. La Fundación le pide al juez la revocación de la ampliación, lo que supondría un varapalo para Roig, que basa su control del club en los títulos que acaparó en dicha ampliación. La sentencia se espera para antes de que acabe el año.