Enfado

Soy un habitual lector de este diario, sobre todo del apartado deportivo. Lo que me produce un enfado cuando veo la gran subjetividad con la que se comentan los partidos de fútbol. Sólo hay que fijarse en las primeras páginas, en las que normalmente siempre está presente el Real Madrid, que ocupa más columnas que el Barcelona y los demás. ¿A qué se debe la importancia que se le da a este equipo? No sé si los periodistas se han fijado alguna vez en que el Barcelona está en la cabeza junto al Real Madrid por mucho que les desagrade.En segundo lugar, soy aficionado al Atlético de Madrid y me lleg...

Soy un habitual lector de este diario, sobre todo del apartado deportivo. Lo que me produce un enfado cuando veo la gran subjetividad con la que se comentan los partidos de fútbol. Sólo hay que fijarse en las primeras páginas, en las que normalmente siempre está presente el Real Madrid, que ocupa más columnas que el Barcelona y los demás. ¿A qué se debe la importancia que se le da a este equipo? No sé si los periodistas se han fijado alguna vez en que el Barcelona está en la cabeza junto al Real Madrid por mucho que les desagrade.En segundo lugar, soy aficionado al Atlético de Madrid y me llego a enfadar gravemente cada vez que leo las columnas dedicadas al Atlético, en las que siempre parece que pierde, aunque haya ganado por 3-1. En los artículos se menciona el mal juego, la mala defensa... ¿Pero vieron acaso el partido? Creo, personalmente, que estaban viendo otro canal, quizás algún otro partido, o a lo mejor es que lo escribía un madridista demasiado subjetivo. Me estoy refiriendo con esta carta al partido del Atlético contra el Valencia, en el que ganó mi equipo por 3-1, y el 23 de noviembre de 1997, José Miguélez, el autor de este escalofriante artículo, deja por los suelos al Atlético de Madrid. No sé de qué equipo será este agudo periodista. Personalmente me gustaría decirle que vea los partidos y no sólo los colores de las camisetas. Creo que le echa mucha imaginación. Está bien tener imaginación para un buen escritor de novelas de ficción, pero no para un periodista deportivo.-