"Madrid es un crisol de diferentes culturas en contacto"

Si hay alguien conocido en el mundo publicitario y en el del videoclip por su capacidad para romper moldes, ese es José Luis Lozano. Granadino de 37 años, inició su carrera con clips como Embrujada o Lobohombre en París, allá por 1983, y se ha atrevido con todo: desde poner a Manolo Tena entre peinetas y mantones de Manila a hacer cantar a Isabel Pantoja en un decorado a lo Tim, Burton, en medio de tumbas y con farolas kilométricas. Como realizador de anuncios tiene en su haber premios como el León de Bronce en el último Festival Internacional de Publicidad de Cannes y otr...

Si hay alguien conocido en el mundo publicitario y en el del videoclip por su capacidad para romper moldes, ese es José Luis Lozano. Granadino de 37 años, inició su carrera con clips como Embrujada o Lobohombre en París, allá por 1983, y se ha atrevido con todo: desde poner a Manolo Tena entre peinetas y mantones de Manila a hacer cantar a Isabel Pantoja en un decorado a lo Tim, Burton, en medio de tumbas y con farolas kilométricas. Como realizador de anuncios tiene en su haber premios como el León de Bronce en el último Festival Internacional de Publicidad de Cannes y otros galardones. Además es músico, prueba de vez en cuando la interpretación para entender "el difícil asunto de la dirección de actores" y rodó en 1985 el filme En penumbra. Hace unos meses se unió a Silvia Suárez y Miguel Ángel Barbero para formar Cénit Producciones, que tiene entre sus proyectos más inmediatos la realización de la película ylegales, escrita y dirigida por él mismo.Pregunta. ¿Qué cuenta ylegales?

Respuesta. La historia de un joven Pinocho marroquí que llega a España buscando el paraíso, lleno de buenas intenciones, pero a cada paso que da se hunde más en la negritud, en la ilegalidad. También es un proyecto que sucede en un Madrid que no se ha visto hasta ahora.

P. Pasar de rodar anuncios millonarios a una película sobre ilegales es un cambio muy grande.

R. He apostado por lo que mejor responde a una sensibilidad, a una actualidad, a un compromiso con cosas que están sucediendo y a las cuales estoy muy próximo. Con esta película se entra en una dimensión de la realidad muy dura, que mucha gente prefiere no conocer, pero siento que éste es el proyecto que tengo que hacer ahora.

P Como realizador de clips, su forma de hacer es un tanto peculiar.

R. Siempre me he preocupado de integrar todos los aspectos del marketing; es decir, saber qué problemas hay que solucionar en la comunicación de la imagen del artista respetando a la vez su autenticidad. Esto que ahora parece tan normal, hace unos años no lo hacía aquí casi nadie.

P ¿Por qué Lobo-hombre en París, que es un clip, ganó tantos premios como corto?

R. En aquel momento aún no había llegado el boom del clip a España. Lo tuve que producir yo mismo con otros tres socios y lo rodé como si fuera un corto pero con una versión igual sin títulos de crédito para su distribución discográfica. Toda una aventura.

P. A los 19 años vino a vivir a Madrid. ¿Qué le ha dado esta ciudad a su obra?

R. Madrid ha sido el crisol donde he podido entrar en contacto, con muchas culturas, muchas maneras de hacer, que me han configurado y donde yo también he tenido mi parte en configurar modas y estilos de vivir.