ENFRENTADOS POR DIANA

La imagen de Diana de Gales como embajadora sentimental del Reino Unido en el mundo y, sobre todo, la campaña por la prohibición de las minas antipersonales en la que está empeñada la princesa comienza a crear problemas políticos en aquel país con inquietante regularidad. "[El Gobierno] está haciendo un gran trabajo", afirmó Diana al diario francés Le Monde acerca de la política del Ejecutivo laborista de Tony Blair sobre las minas -aboga por su eliminación-; "su predecesor era muy desesperanzador", dijo del antiguo Gabinete conservador de John Major. Y ayer ...

La imagen de Diana de Gales como embajadora sentimental del Reino Unido en el mundo y, sobre todo, la campaña por la prohibición de las minas antipersonales en la que está empeñada la princesa comienza a crear problemas políticos en aquel país con inquietante regularidad. "[El Gobierno] está haciendo un gran trabajo", afirmó Diana al diario francés Le Monde acerca de la política del Ejecutivo laborista de Tony Blair sobre las minas -aboga por su eliminación-; "su predecesor era muy desesperanzador", dijo del antiguo Gabinete conservador de John Major. Y ayer prendió la polémica en torno a Lady Di, complacidos los gobernantes e irritados los de la oposición. A favor, el ministro de Exteriores, Robin Cook, encantado con que Diana reconozca "que el Gobierno comparte completamente su preocupación". En contra, diputados tories como David Wilshire, que han advertido agriamente, a Diana que no se meta en política. "Es seriamente peligroso arrastrar a la familia real a la arena política. Creo que no deberíamos permitir que una joven que tira ya a mujer de mediana edad altere la Constitución británica ella sola", sentenció Wilshire.-