VÍRGENES POR LA CLONACIÓN
El partido político Vírgenes de Rusia, integrado por mujeres que no han conocido varón y cuya máxima es el voto de castidad, ha arrimado la ciencia a su terreno y ha propuesto que la reproducción humana se haga por clonación y se evite así el contacto sexual entre hombre y mujer. Elizaveta Lavínskaya, secretaria general de la formación, apunta el precedente de la oveja Dolly (clonada recientemente en el Reino Unido) como el camino a seguir por la especie humana. El peculiar partido de las vírgenes rusas, que esta semana ha celebrado su segundo congreso en Moscú, sólo cuenta con 12 afili...
El partido político Vírgenes de Rusia, integrado por mujeres que no han conocido varón y cuya máxima es el voto de castidad, ha arrimado la ciencia a su terreno y ha propuesto que la reproducción humana se haga por clonación y se evite así el contacto sexual entre hombre y mujer. Elizaveta Lavínskaya, secretaria general de la formación, apunta el precedente de la oveja Dolly (clonada recientemente en el Reino Unido) como el camino a seguir por la especie humana. El peculiar partido de las vírgenes rusas, que esta semana ha celebrado su segundo congreso en Moscú, sólo cuenta con 12 afiliadas, lo que, lejos de causarle dudas sobre su predicamento, hace recordar a Lavínskaya que "otro movimiento que conquistó medio mundo también comenzó sólo con 12 adeptos", en bíblica alusión a los apóstoles de Jesucristo. La líder del partido ha resumido al diario Izvestia el ideario básico del mismo: "Todas las militantes deben ser puras de alma y cuerpo, y no se permite sometimiento alguno a los hombres, ni económico ni espiritual ni físico". Al borde de la androfobia, Elizaveta considera a los hombres "pobres de espíritu, perversos y acomplejados". Además, presume de militantes intelectuales, pues entre ellas hay una artista, una cantante, una psicóloga y una historiadora.-