COPA DEL REY: TERCERA RONDA (VUELTA)

El Rayo sigue a lomos de Guilherme y Klimowicz

Fue una cuestión de lógica. Si Guilherme y Klimowicz jugaran en el Osasuna, los navarros se habrían clasificado. Pero juegan en el Rayo. Y por eso el Rayo ganó ayer. Porque las cosas son como son y en el fútbol suelen mandar la calidad y la precisión, o sea Guilherme y Klimowicz.Lo que aconteció entre ambos tuvo pinta de mano a mano. No había pique, pero lo parecía. Ni celos, seguramente. Hubo colaboración, empeño y ganas de agradar. Y también ánimo de venganza en el caso de Guilherme. Y quizá, en el caso de su socio, de gritarle a Vallecas algo así como soy capaz de esto y de mucho más. Entre...

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Fue una cuestión de lógica. Si Guilherme y Klimowicz jugaran en el Osasuna, los navarros se habrían clasificado. Pero juegan en el Rayo. Y por eso el Rayo ganó ayer. Porque las cosas son como son y en el fútbol suelen mandar la calidad y la precisión, o sea Guilherme y Klimowicz.Lo que aconteció entre ambos tuvo pinta de mano a mano. No había pique, pero lo parecía. Ni celos, seguramente. Hubo colaboración, empeño y ganas de agradar. Y también ánimo de venganza en el caso de Guilherme. Y quizá, en el caso de su socio, de gritarle a Vallecas algo así como soy capaz de esto y de mucho más. Entre los dos desnudaron y a punto estuvieron de achicharrar al Osasuna más gris que recuerda la historia moderna.

Y como el Rayo, pese al césped que pisa, es un equipo de Primera, pues aprovechó lo que le dieron. Que fue mucho. Marcó un golazo Klimowicz, tras jugada de Guilherme, y le imitó el brasileño, un futbolista insustituible, con mayúsculas, en este Rayo. Redujeron diferencias los navarros en la única jugada con sentido que fueron capaces de pergeñar. Se suponía que a partir de entonces el Rayo sufriría. Por suponer que no quede. Salió Moreau para tocarla donde nadie la tocaba, en el inmenso desierto de fútbol que era la franja central. Y la tocó. Llegó entonces el tercero en una acción de ensueño, que nació en la caricia que el francés le regaló a un balón que Guilherme, el más listo de todos, dejó pasar y que llevó a la red Klimowicz, tan desgarbado él, tan imprevisible, tan supuestamente patoso. Tan futbolista.

No hubo sorpresas

No hubo sorpresas y se se clasificaron para los octavos de final, además del Real Madrid y el Rayo, el Athletic, Racing, Celta, Espanyol, Compostela y Betis. Hubo estos resultados (entre paréntesis los de ida): Athletic, 2; Víllarreal, 2 (1-0). Racing, 1; Zaragoza, 0 (1-1). Logroñés, 2; Celta, 2 (0-2). Sporting, 2; Espanyol, 2 (1-4). Compostela, 3; Oviedo, 0 (0l-). Betis, 3; Granada, 0 (0-1).

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