La confesión del testaferro de Conde

"Recibí diversas presiones, tipo bromas. Uno de mis mandatarios me hizo un gesto con la mano para darme a entender que me cortarían la garganta; otra presión, jurídicamente más aceptable, me indicaba que tenía que atenerme al secreto profesional", declaró el testaferro suizo Paolo Gallone, al confesar, el 6 de febrero pasado, que Mario Conde, Mariano Gómez de Liaño y Francisco Sitges eran sus clientes. Para ellos creó las sociedades Kaneko, Asni y Jamuna. Las órdenes para invertir y enviar dinero las daban Gómez de Liaño y Sitges, por cuenta propia o por deseo de Conde. EL PAIS publica el text...

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"Recibí diversas presiones, tipo bromas. Uno de mis mandatarios me hizo un gesto con la mano para darme a entender que me cortarían la garganta; otra presión, jurídicamente más aceptable, me indicaba que tenía que atenerme al secreto profesional", declaró el testaferro suizo Paolo Gallone, al confesar, el 6 de febrero pasado, que Mario Conde, Mariano Gómez de Liaño y Francisco Sitges eran sus clientes. Para ellos creó las sociedades Kaneko, Asni y Jamuna. Las órdenes para invertir y enviar dinero las daban Gómez de Liaño y Sitges, por cuenta propia o por deseo de Conde. EL PAIS publica el texto de la comisión rogatoria en poder de la Audiencia Nacional.

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