Otra sorpresa de laboratorio

Esnáider y Pantic, junto al balón; Toni, unos metros por detrás, y a la derecha, pegados a la línea de centro y preparados para la carrera, Kiko, Caminero y Geli. Iba a comenzar la segunda parte y el Atlético estaba a punto de mostrar el, último producto de su laboratorio. La jugada acabó en gol y sucedió muy deprisa: Toni recibió el balón y lo mandó en largo hacia la derecha, por donde corría Caminero, que peinó de cabeza y tras hacer la pared con Kiko avanzó unos metros y centró de rosca. Esnáider -tras el saque había salido disparado hacia el área- remató la faena de cabeza. A partir de aho...

Esnáider y Pantic, junto al balón; Toni, unos metros por detrás, y a la derecha, pegados a la línea de centro y preparados para la carrera, Kiko, Caminero y Geli. Iba a comenzar la segunda parte y el Atlético estaba a punto de mostrar el, último producto de su laboratorio. La jugada acabó en gol y sucedió muy deprisa: Toni recibió el balón y lo mandó en largo hacia la derecha, por donde corría Caminero, que peinó de cabeza y tras hacer la pared con Kiko avanzó unos metros y centró de rosca. Esnáider -tras el saque había salido disparado hacia el área- remató la faena de cabeza. A partir de ahora, los rivales van a tener que prestar atención al Atlético hasta en el saque de centro. Su explora ción de las acciones a balón parado no se agota."Ya lo habíamos hecho más de una vez", comentó satisfecho Antic. "No nos vamos a cansar nunca de seguir ensayando este tipo de trabajo. Nos da frutos". El preparador rojiblanco terminó por lanzar un desafío a los rivales sobre este tipo de jugadas: "Cada partido va a tener su sorpresa".

En lo que sí se equivocó ayer Radomir Antic, al menos eso confesó tras el partido, fue en regar el césped del Bernabéu:, "Nos precipitamos. Por la presión del Celta, fue contraproducente regarlo".