Padre nuestro

Padre nuestro que estás en el Tour, santificado sea tu nombre y, más que nada, tu apellido sea santificado. Te lo pedimos a grito pelado: ¡que venga a nosotros el Estado de bienestar! Y de todos modos, que tus caprichos y voluntades sean calderilla fácil y noble en el Tour como en las carreteras comarcales y caminos y en todos los senderos del Señor. Sólo te pedimos el foie-gras de cada día y, de no ser así, en el caso más espiritual, una salchicha aunque sea de Francfort. Perdona nuestras ofensas, nuestras pájaras, quiere decirse, igualito que nosotros perdonamos a los que no cotizan l...

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Padre nuestro que estás en el Tour, santificado sea tu nombre y, más que nada, tu apellido sea santificado. Te lo pedimos a grito pelado: ¡que venga a nosotros el Estado de bienestar! Y de todos modos, que tus caprichos y voluntades sean calderilla fácil y noble en el Tour como en las carreteras comarcales y caminos y en todos los senderos del Señor. Sólo te pedimos el foie-gras de cada día y, de no ser así, en el caso más espiritual, una salchicha aunque sea de Francfort. Perdona nuestras ofensas, nuestras pájaras, quiere decirse, igualito que nosotros perdonamos a los que no cotizan la Seguridad Social. ¿Qué más?: no nos dejes tiraos, por favor, que del sida, ya está al tanto nuestro médico de cabecera.-

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