Los partidos replican a ETA que la paz exige el fin del secuestro y los atentados
La oferta de diálogo de ETA, reforzada por la tregua de una semana acordada por la banda terrorista, no merece a los partidos democráticos del País Vasco, representados en la Mesa de Ajuria Enea, ninguna credibilidad a menos que se cumpla inmediatamente una serie de condiciones mínimas. Las dos primeras son la liberación del funcionario secuestrado José Antonio Ortega Lara y el fin de los atentados. Así se lo hicieron saber ayer en un comunicado de respuesta al escrito en el que ETA anunciaba el domingo el inicio de una tregua de una semana y emplazaba al Gobierno central a pronunciarse sobre ...
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La oferta de diálogo de ETA, reforzada por la tregua de una semana acordada por la banda terrorista, no merece a los partidos democráticos del País Vasco, representados en la Mesa de Ajuria Enea, ninguna credibilidad a menos que se cumpla inmediatamente una serie de condiciones mínimas. Las dos primeras son la liberación del funcionario secuestrado José Antonio Ortega Lara y el fin de los atentados. Así se lo hicieron saber ayer en un comunicado de respuesta al escrito en el que ETA anunciaba el domingo el inicio de una tregua de una semana y emplazaba al Gobierno central a pronunciarse sobre el derecho de autodeterminación.
Además de las dos condiciones citadas, el comunicado elaborado ayer por los partidos de la Mesa de Ajuria Enea -todos los parlamentarios del País Vasco, con excepción de Herri Batasuna- exige a la banda terrorista que reconozca la pluralidad del pueblo vasco y la legitimidad de sus instituciones.La reunión celebrada durante toda la tarde de ayer en la sede del Gobierno vasco había despertado una expectación muy superior a la de ocasiones anteriores. El reto era hacer ver a la organización terrorista que su oferta podía tener una respuesta contundente de las fuerzas democráticas.
En el supuesto de que ETA cumpla con los requisitos fijados ayer, los partidos de Ajuria Enea se comprometen a "iniciar un proceso sincero y abierto de diálogo entre todos los partidos políticos vascos con representación parlamentaria". Este proceso tendría como objetivo conseguir "un consenso capaz de alcanzar la definitiva normalización y pacificación". Del mismo modo, los partidos democráticos proclaman su compromiso de "apoyar otros procesos de diálogo entre los poderes competentes del Estado y quienes hayan decidido abandonar la violencia".
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