VOLVIÓ SIN NADA

A la misma hora en que el pasado domingo Aznar y Pujol iniciaban a solas su diálogo con vistas a la investidura, Francisco Álvarez Cascos, secretario general del PP, negociaba con el río Asón, a 400 kilómetros de Madrid, la captura del primer salmón del año en Cantabria. Infructuosa tentativa porque, después de largas horas de lanzar el, señuelo al agua en el coto de Peña Quebrada, hubo de desistir y volver de vacío a Madrid. No obstante, ningún aficionado enterado se atrevería a cuestionar su trayectoria deportiva. Se ufana Álvarez Cascos de haber llegado un año de echar ...

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A la misma hora en que el pasado domingo Aznar y Pujol iniciaban a solas su diálogo con vistas a la investidura, Francisco Álvarez Cascos, secretario general del PP, negociaba con el río Asón, a 400 kilómetros de Madrid, la captura del primer salmón del año en Cantabria. Infructuosa tentativa porque, después de largas horas de lanzar el, señuelo al agua en el coto de Peña Quebrada, hubo de desistir y volver de vacío a Madrid. No obstante, ningún aficionado enterado se atrevería a cuestionar su trayectoria deportiva. Se ufana Álvarez Cascos de haber llegado un año de echar a la orilla hasta 27 ejemplares y haber capturado en 1993 en Cantabria el salmón con mayor peso de aquella temporada, que rozó los 10 kilos. A unos dos kilómetros de Peña Quebrada, donde Alvarez Cascos fracasó esta semana, se encuentra el llamado pozo Franco, a partir del cual antes cerraban el remonte de salmones para que el general tuviese unas fabulosas pesquerías. El Asón no tiene hoy semejante abundancia piscícola y la guardería se limita a hacer respetar la ley. Álvarez Cascos no quiso hablar de política, aunque dijo creer que las negociaciones con los nacionalistas se prolongarán "más de lo que la gente piensa". El campanu político tardará, pues, en llegar.-

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