Huarte suspende pagos tras descubrirse un 'agujero' adicional de 10.000 millones

La crisis de Huarte ha estallado. El Consejo de Administración de la empresa, tras una reunión de más de quince horas, que acabó a las nueve de la mañana de ayer, decidió presentar la suspensión de pagos al descubrir la auditoría que los anteriores gestores ocultaron pérdidas por más de 10.000 millones de pesetas. El presidente de la sociedad, Miguel Zorita, que desde el pasado mes de febrero se hizo cargo de la empresa para ejecutar el plan, presentó la dimisión. Le ha sustituido Jaime Azcona Garnica, un consejero histórico de la constructora. Ayer, la cotización de la constructora en Bolsa q...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La crisis de Huarte ha estallado. El Consejo de Administración de la empresa, tras una reunión de más de quince horas, que acabó a las nueve de la mañana de ayer, decidió presentar la suspensión de pagos al descubrir la auditoría que los anteriores gestores ocultaron pérdidas por más de 10.000 millones de pesetas. El presidente de la sociedad, Miguel Zorita, que desde el pasado mes de febrero se hizo cargo de la empresa para ejecutar el plan, presentó la dimisión. Le ha sustituido Jaime Azcona Garnica, un consejero histórico de la constructora. Ayer, la cotización de la constructora en Bolsa quedó suspendida. Constructora San José, principal accionista, se ha comprometido a realizar un nuevo plan de viabilidad.

A la dimisión de Zorita se ha sumado la de los consejeros Jacinto Rey y José María Chimeno, que llegaron a la empresa tras la aprobación del plan de reflotamiento el pasado mes de febrero. Según dijo ayer Miguel Zorita, existen "grandes divergencias" entre los datos que ofrecieron los anteriores gestores, Mario Caprile y Joaquín Casasús, al nuevo equipo gestor y las cuentas que ha presentado el pasado miércoles la firma auditora Peat Marwick (KPGM). Estas divergencias han cogido por sorpresa a principal accionista Constructora San José que dentro de prometió en la gestión junto con un conjunto de bancos acreedores que controlan el 16,8% del capital.La auditora estima que las pérdidas de anteriores ejercicios son superiores en 10.000 millones a las que presentaron el pasado mes de septiembre los anteriores gestores (28.000 millones). Estas pérdidas provienen principalmente de una depreciación de la cartera de valores por 4.450 millones y a la aparición de una factura pagada a HASA de 968 millones que no está reflejada en la cuenta de resultados y de una sobrevaloración de activos.

El plan de salvación de la constructora, que se había puesto en marcha en febrero, queda ahora truncado. "El plan de viabilidad debe replantearse totalmente", dijo ayer Zorita. El presidente saliente, que era directivo de Argentaria, uno de grupos bancarios tradicionalmente acreedor y ahora presente en el capital, aseguró que la constructora puede superar la suspensión de pagos. Añadió que la presentación de la suspensión de pagos responde a la protección de la sociedad ante la posible petición de quiebra por parte de algunos acreedores.

Ayer fueron informados los bancos (Argentaria, Atlántico, Aresbank y BCH) que habían dado su aprobación al plan de viabilidad. El accionariado de la empresa no ha variado tras el consejo de administración de ayer. Está compuesto por Constructora San José, con un 24,9% del capital; un conjunto de bancos, que suman el 16,8% (Argentaria tiene el 3%) y la propia entidad, que tiene una autocartera del 8,6%. El restante 49,7% está atomizado en Bolsa.

En el balance que han presentado los auditores y que ha servido de base para presentar la suspensión de pagos se reflejan unas pérdidas de 31.193 millones de pesetas y unos fondos propios negativos a final de 1995 de 1.139 millones de pesetas. Tras el efecto del plan de reflotamiento, el balance a 13 de marzo era de unos fondos propios positivos de 1.023 millones de pesetas.

Los nuevos accionistas entraron en la empresa con la intención de aplicar el plan diseñado por los antiguos directivos de la empresa y en el que se cuantificaban las pérdidas en 28.000 millones de pesetas. Este plan proponía aliviar los problemas de tesorería vendiendo activos por valor de unos 15.000 millones. Sin embargo, al aparecer nuevas pérdidas se ha eliminado la posibilidad de vender los activos, lo que ha echado por tierra el plan.

Divergencias

Zorita no quiso precisar ayer las posibles responsabilidades de los antiguos gestores al facilitar cifras divergentes, cifras que figuraban tanto en el plan de viabilidad como en la auditoría de 1994 y en las informaciones de la empresa enviadas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Un ejemplo de esa divergencia es que en septiembre pasado las cifras enviadas a la CNMV reflejaban un beneficio de 1.100 millones, cuando en el plan quedaban reflejados unas pérdidas de 28.000 millones.La Federación Estatal de Comisiones Obreras anunció que pedirá responsabilidades por la falta de información que ha habido hacia este sindicato que es mayoritario en todos los comités. Los trabajadores comenzarán hoy movilizaciones contra la banca acreedora.

Archivado En