'Scout', y de tonto, ni un pelo

"Yo soy scout, y de tonto, ni un pelo; yo soy scout, y es fenomenal; yo soy scout, ¿tú, qué eres, chaval?". Con este himno arrancaron ayer los Exploradores de Madrid la XVII edición de su Festival de la Canción Scout. Desde primera hora de la mañana, un millar de chavales, de entre 6 y 21 años, procedentes de todos los rincones de la región, aguardaban su turno para entrar en el salón de actos del colegio Obispo Perelló (distrito de Ciudad Lineal). Todos impecables con su uniforme scout: camisa azul, pantalón o bermudas, pañuelo de colores al cuello y gorrita...

"Yo soy scout, y de tonto, ni un pelo; yo soy scout, y es fenomenal; yo soy scout, ¿tú, qué eres, chaval?". Con este himno arrancaron ayer los Exploradores de Madrid la XVII edición de su Festival de la Canción Scout. Desde primera hora de la mañana, un millar de chavales, de entre 6 y 21 años, procedentes de todos los rincones de la región, aguardaban su turno para entrar en el salón de actos del colegio Obispo Perelló (distrito de Ciudad Lineal). Todos impecables con su uniforme scout: camisa azul, pantalón o bermudas, pañuelo de colores al cuello y gorrita.Algunos aprovecharon la larga espera, más de una hora, para ensayar su actuación en plena calle. Una monitora del grupo de Leganés, Mónica Torquemada, de 20 años, intentaba poner orden: "Venga, vamos a volver a cantar la canción. Sabemos que no vamos a ganar, porque no traemos guitarra. No pegaba con la letra de la canción [Dónde aprendí a soñar], y salimos sólo con la voz".

Uno de los más pequeños, bautizados dentro (le la agrupación como castores, Sergio Gaspar, de siete años, intentaba recordar la letra. "Es que estoy un poco nervioso, porque es la primera vez que canto en un festival", comentaba.

Por el escenario pasaron 25 grupos, en total 650 voces y alguna que otra guitarra, bongo o pandereta. Los enchufes estaban prohibidos. Lo explicaba, antes de comenzar el festival, el responsable de la organización, Juan Carlos Martínez: "Sólo pueden cantar una canción, que tiene que haber sido compuesta por algún miembro del grupo. Y sólo están permitidos los instrumentos que se pueden llevar de acampada. Ésas son las únicas condiciones".

Entre bambalinas y antes de pisar la tarima, varios chicos del grupo Alcores, de Argüelles, se anticipaban a la decisión del jurado: "Seguro que ganamos nosotros. Nuestra canción es muy bonita, es un canto a la solidaridad", explicaba David Hernández, de 10 años y con la experiencia de dos festivales más. Otro compañero, Javier García, de la misma edad y con cara de pillo, decía: "Estamos nerviosos, pero seguro que vencemos". Al final, los ganadores resultaron ser otros: el grupo Maravillas, con la canción Zotal overdose (Campamento póstumo), que obtuvieron, además del triunfó y los aplausos, la plaza para reprensentar a la Comunidad de Madrid en el Festival Nacional de la Canción Scout, que se celebrará el próximo 5 de mayo en Burgos.

Pero lo más importante, como en toda competición que se precie, era participar. Esto mismo opinaba Nacho García, de 20 años, uno de los componentes del grupo de Moncloa: "Ganar no es lo más importante. Aquí hay un buen ambiente y de lo que se trata es de pasárnoslo bien. Los mayores cantamos por los más pequeños".