Javier Álvarez se tomó un descanso, según su compañía

La discográfica de Javier Álvarez, de 26 años, envió ayer por fax a este periódico una nota, que atribuye al cantante, donde se explica que éste se ha tomado un descanso. La nota, con membrete de la compañía, Chrysalis, procede de Granada, donde se hallaban ayer sus directivos. Chrysalis se negó ayer a facilitar el contacto de EL PAÍS con el cantautor.El comunicado dice textualmente: "En referencia al artículo Javier Álvarez se esfuma y deja a medias su segundo disco, firmado por Ricardo Cantalapiedra y publicado por EL PAÍS de ayer, quisiera precisar y ante todo agradecer a Rica...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La discográfica de Javier Álvarez, de 26 años, envió ayer por fax a este periódico una nota, que atribuye al cantante, donde se explica que éste se ha tomado un descanso. La nota, con membrete de la compañía, Chrysalis, procede de Granada, donde se hallaban ayer sus directivos. Chrysalis se negó ayer a facilitar el contacto de EL PAÍS con el cantautor.El comunicado dice textualmente: "En referencia al artículo Javier Álvarez se esfuma y deja a medias su segundo disco, firmado por Ricardo Cantalapiedra y publicado por EL PAÍS de ayer, quisiera precisar y ante todo agradecer a Ricardo las maravillosas y entrañables palabras vertidas en el mencionado artículo, ciertamente exageradas por su cariño hacia mi persona. Que lejos de mi intención, al menos conscientemente, ha estado crear ninguna expectativa, de una u otra índole, respecto de mis apariciones públicas, y si bien es cierta y conocida la anulación momentánea de algunas galas programadas, al haber padecido una fuerte afección de garganta, como justifiqué documentalmente en su día, lejos está mi intención suspender la grabación de mi segundo LP, que reafirma mi deber y dedicación hacia cuantos han creído y creen en mi modesta aportación al panorama musical español, demostrado con su seguimiento, preocupación y entusiasmo y que eternamente agradezco. Se trata, pues, de un breve paréntesis en el estresante y desasosegante periodo vivido, que por su rapidez, intensidad e inusitada aparición, sin embargo maravilloso, precisaba de un descanso en mi carrera para enfrentarme con mayor veracidad, autenticidad y sinceridad al reto que me depara el futuro y así reapareceré como si nada hubiera pasado".

El primer párrafo de la noticia de EL PAÍS decía así: "Javier Álvarez se ha encerrado en algún sitio y nadie consigue dar con él. Ha dejado a medio grabar su segundo disco, ha suspendido conciertos, no se le ve por el Retiro ni por los bares que solía frecuentar, no contesta al teléfono. Aunque respetan escrupulosamente cualquier opción íntima del cantante, sus amigos íntimos le añoran desde hace semanas. Algunos dicen que ha decidido abandonar la música por motivos que ninguno conoce". A continuación se resumía la trayectoria del cantante.

Mentís

Abc publicó ayer un largo texto en el que desmentía esa información, y decía: "Algún cantamañanas parece empeñado en convertir la información musical en una entrega más de Quién sabe dónde. Sin ir más lejos, la cancelación de algunos conciertos ( ... ) por parte de Álvarez le ha hecho suponer a EL PAÍS que el artista, o se encontraba aquejado de algún extraño mal físico o psíquico o había desaparecido en combate, o bien había decidido dejar la música y se iba a dedicar a la búsqueda de la verdad en algún lejano monasterio tibetano".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En