Cartas al director

El Club Alpino español, pase lo que pase

Conozco a Fernando. He pensado en él durante los 10 días que lleva incomunicado en Cotos, en su albergue Coppel del Club Alpino. Hoy, miércoles 31, su único vehículo seguía sepultado la misma cantidad de días bajo más de dos metros de nieve, sin posibilidad alguna de desplazamientos ni comunicación con los pueblos más próximos.Brindo por ti, Fernando. Alzo mi copa de este vino rosado, afrutado y oloroso, y mientras disfruto con la maravilla de su aroma recuerdo con deleite los momentos que he pasado en tu casa. Porque ha sido mi segunda casa. Tú me has ofrecido siempre una cama limpia, una chi...

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Conozco a Fernando. He pensado en él durante los 10 días que lleva incomunicado en Cotos, en su albergue Coppel del Club Alpino. Hoy, miércoles 31, su único vehículo seguía sepultado la misma cantidad de días bajo más de dos metros de nieve, sin posibilidad alguna de desplazamientos ni comunicación con los pueblos más próximos.Brindo por ti, Fernando. Alzo mi copa de este vino rosado, afrutado y oloroso, y mientras disfruto con la maravilla de su aroma recuerdo con deleite los momentos que he pasado en tu casa. Porque ha sido mi segunda casa. Tú me has ofrecido siempre una cama limpia, una chimenea caliente (excelente rincón para soñar), buena comida y, lo mejor de todo, tu conversación. Tus largas y exquisitas tertulias nocturnas junto al fuego, sobre temas tan diversos, especiales, interesantes... siempre hablando desde ti, desde lo que eres, lo que sientes, por lo que luchas y amas... Brindo por ti, por tu valor, por tu privilegiada soledad en esas alturas, hasta donde no te llega todo nuestro ruido y nuestra prisa absurda. Ya ves, hemos seguido con preocupación cada noticia... incluso aquella mágica noche en que tu techo fue la salvación para tanta gente perdida. Tu techo... el mejor del mundo, sin duda, cuando todas nuestras necesidades se reducen a un poco de calor. Calor humano, del bueno, del que no puede sustituirse por ninguna otra fuente energética.

Sois en verdad la esencia del hombre bueno, generoso y valiente que no debe perderse. Pase lo que pase.-

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