NECROLOGICAS

Juan Antonio Linares, magistrado del Tribunal Supremo

Magistrado de Trabajo por vocación y dedicación, su trayectoria profesional y humana estuvo vinculada al orden social de la jurisdicción y al derecho laboral. Su sentido de la justicia, inseparable de los problemas sociales y humanos que han de resolver los tribunales, se vio particularmente atraído por este ámbito jurisdiccional, al que accedió como magistrado de Trabajo en Barcelona y Madrid, precisamente durante los periodos de intensa conflictividad social que precedieron a la recuperación de las libertades democráticas.La efectividad de la tutela judicial, en el aspecto de proximidad a la...

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Magistrado de Trabajo por vocación y dedicación, su trayectoria profesional y humana estuvo vinculada al orden social de la jurisdicción y al derecho laboral. Su sentido de la justicia, inseparable de los problemas sociales y humanos que han de resolver los tribunales, se vio particularmente atraído por este ámbito jurisdiccional, al que accedió como magistrado de Trabajo en Barcelona y Madrid, precisamente durante los periodos de intensa conflictividad social que precedieron a la recuperación de las libertades democráticas.La efectividad de la tutela judicial, en el aspecto de proximidad a las partes y al propio objeto del proceso y de cumplimiento eficaz de lo resuelto, constituyó el motivo central de sus preocupaciones, primero en el ejercicio de la función de juzgar y más tarde como vocal del Consejo General del Poder Judicial. Trabajadores y patronos, sindicatos y asociaciones, abogados y graduados sociales, le tuvieron siempre a su disposición para resolver cualquier tipo de problema.

A su inspiración e iniciativa se deben, en buena parte, muchas de las innovaciones procesales de la Ley de Procedimiento Laboral de 1990, como experiencias válidas para su posible extensión a otros órdenes jurisdiccionales. Importantes fueron, también, algunas de sus aportaciones jurisprudenciales, primero en materia sindical y de conflictos colectivos en el Tribunal Central de Trabajo, más tarde en el Tribunal Superior de Madrid, en procesos de tutela de los derechos y libertades fundamentales y, por último, hasta su reciente fallecimiento, como magistrados de la Sala Cuarta del Tribunal Supremo.

Fue también profesor universitario, aportando sus experiencias como magistrado a la docencia, y publicó importantes trabajos sobre Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. Compañeros, amigos, profesionales del derecho y justiciables echamos hoy de menos a un excelente magistrado.- PASCUAL SALA SÁNCHEZ es presidente del Tribunal Supremo y del CGPJ.

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