AUTOMOVILISMO: RALLY DE AUSTRALIA

Sainz abandona y pierde prácticamente sus opciones al tercer título mundial

Rally de Australia sigue siendo maldito para Carlos Sainz. Es esa una carrera que nunca ha ganado; la única victoria que falta en su extensa colección. Es esa la tierra donde en 1991 sufrió el accidente más serio de su carrera; aquel que estremeció el mundo del motor viendo su coche dar vueltas de campana. Y ayer aquel lugar de las antípodas se convirtió en el escenario de una de las mayores desilusiones del bicampeón. Su quinta participación se saldó con el abandono por culpa de una rama que destrozó el radiador del Subaru Impreza número 5. Sainz quedó fuera de combate apenas iniciada la pr...

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Rally de Australia sigue siendo maldito para Carlos Sainz. Es esa una carrera que nunca ha ganado; la única victoria que falta en su extensa colección. Es esa la tierra donde en 1991 sufrió el accidente más serio de su carrera; aquel que estremeció el mundo del motor viendo su coche dar vueltas de campana. Y ayer aquel lugar de las antípodas se convirtió en el escenario de una de las mayores desilusiones del bicampeón. Su quinta participación se saldó con el abandono por culpa de una rama que destrozó el radiador del Subaru Impreza número 5. Sainz quedó fuera de combate apenas iniciada la prueba y sus opciones de conquistar el título mundial aparecen ahora seriamente comprometidas.

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Es este un revés que duele más que otros anteriores. Supone una decepción superior, pues llega después de horas, días, semanas de ejercicios de rehabilitación, de sufrimiento para recuperar el hombro lesionado en un accidente con una bicicleta de montaña. Los esfuerzos que Sainz ha realizado por regresar, contrarreloj, a la actividad del mundial de rallies, para defender sus posibilidades de reconquistar la corona del mundo, no han tenido ningún premio."Ha sido mala suerte", apuntó el piloto madrileño. "Poco después de empezar el tramo más, largo de la primera etapa [45 kilómetros]", relató, "una rama. de un árbol se ha metido en el radiador y ha roto. Nos hemos quedado sin radiador y sin agua". Para Sainz, aquello fue el principio del fin. Consiguió cubrir esa cronometrada, aun perdiendo mucho tiempo, pero después no estaba permitido realizar asistencia mecánica. Y poco más tarde se consumó el abandono: "Nos quedamos sin radiador, sin agua y sin motor"

La segunda retirada

Esta retirada es la segunda de la temporada, después de la registrada en Suecia, ambas por avería. Y, añadida a su obligada ausencia en Nueva Zelanda, supone el tercer rally sin sumar ni un punto. Pese a sus dos triunfos en Montecarlo y Portugal, Sainz tiene ahora muy complicado poder pelear por el título, puesto que sólo quedan dos pruebas del campeonato.Hasta el momento de su abandono en el noveno tramo. del rally octava prueba puntuable del campeonato-, el piloto español se había mantenido a una distancia discreta de los líderes de la carrera. Ocupaba la sexta posición, a apenas un minuto del finlandés Julía Kankkunen (Toyota), uno de sus principales adversarios. El otro, el francés Didier Auriol, líder del Mundial con un punto de ventaja sobre Sainz y Kankkunen, empezó muy fuerte, pero un incidente le hizo perder un tiempo importante. Más tarde, en su afán por recuperar, se salió de la pista y también se vio obligado al abandono -el motor de su Toyota sufrió también un sobrecalentamiento-, lo cual mitigó en parte el desastre de Sainz. Sin embargo, la preocupación para el piloto español y sus intereses por la lucha por el Mundial tienen un nombre propio: Juha Kankkunen. El piloto finlandés, ya cuatro veces campeón del mundo, camina ahora con paso firme hacia su quinta corona.

Con sus dos rivales eliminados prematuramente y dominando la carrera de Australia, kkk -como se conoce a Kankkunen- vuelve a tocar la gloria. Tras la primera etapa, encabeza la clasificación, por delante del escocés Colin McRae (Subaru), segundo; el finlandés Tommi Makinen (Mitsubishi), tercero; y el sueco Kenneth Eriksson (Mitsubishi), cuarto. Todos ellos separados por menos de un minuto, al cierre de esta edición. McRae está situado a sólo 17 segundos de Kankkurien al término de la primera etapa.

"El campeonato del mundo está prácticamente perdido", reconoció ayer Carlos Sainz, "a pesar de que en los rallies no se puede asegurar nada hasta el final. Pero Kankkunen casi nunca falla. Nuestro objetivo es ahora intentar ganar las dos pruebas que faltan [el Rally Cataluña y el del RAC) y esperar a ver qué pasa".

Sólo un fallo de Kankkurien puede devolver la esperanza a Sainz . No obstante, el tetracampeón finlandés se caracteriza precisamente por su seguridad y por ser él quien aprovecha los problemas de los demás. Así es como se ha convertido en el mejor piloto de la historia, con 4 títulos y 21 triunfos en rallies del Mundial, cuatro de ellos en esta prueba. Más (que nadie. Y, por lo que parece, puede seguir aumentando su cuenta, esta vez a costa de la Mala fortuna de Sainz.

"Hubiera sido muy importante para mí poder haber corrido kilómetros en Australia", confesé el piloto español. "Salí a competir fuera de ritmo por mi lesión en el hombro, pero a partir del tercer tramo entré ya en carrera, aunque entonces se nos bloqueaba el cambio de marchas". "El campeonato", acabó, "se nos ha puesto ya casi imposible. Este abandono es prácticamente definitivo".

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