Un centenar de vecinos apedrea la Junta de Vicálvaro y la sede del PP

Un centenar de vecinos causó estragos el pasado sábado en el distrito de Vicálvaro durante la celebración del día de los rastreros, una fiesta ilegal en la que estallan 10.000 petardos. El grupo atacó a la policía y quemó las banderas de la Junta del Distrito. Luego destrozó los cristales de la fachada municipal e hizo añicos las lunas de la sede del PP y el pórtico de una iglesia. Según la policía, no hubo detenidos. La Jefatura Superior de Policía ha expedientado a un inspector de San Blas por no investigar los hechos.

La tradición del petardo rastrero o buscapiés se remonta a 40 ...

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Un centenar de vecinos causó estragos el pasado sábado en el distrito de Vicálvaro durante la celebración del día de los rastreros, una fiesta ilegal en la que estallan 10.000 petardos. El grupo atacó a la policía y quemó las banderas de la Junta del Distrito. Luego destrozó los cristales de la fachada municipal e hizo añicos las lunas de la sede del PP y el pórtico de una iglesia. Según la policía, no hubo detenidos. La Jefatura Superior de Policía ha expedientado a un inspector de San Blas por no investigar los hechos.

La tradición del petardo rastrero o buscapiés se remonta a 40 años atrás en la historia de Vicálvaro; 15 veranos, según otros. "Nadie pide autorización, porque no se podría dar; esos petardos están prohibidos", señala el director del centro cultural del distrito, Ángel Ramos.Según la ardiente costumbre, el segundo sábado de septiembre los vecinos se atrincheran en la plaza de Antonio de Andrés mientras estallan cientos de ruidosos cohetes. Antonio, un vecino del barrio, se encarga de vender la munición a 1.000 pesetas la docena. El pasado fin de semana le compraron más de 10.000 unidades.

La fiesta se calentó durante la madrugada. Un grupo de vecinos trepó por la fachada de la Junta Municipal de Vicálvaro para coger la bandera de España y la de la Comunidad de Madrid. Luego las prendieron fuego. El bedel de la Junta llamó a la Policía Municipal. Los agentes se presentaron en la plaza y detuvieron a uno de los chicos. El concejal de Seguridad Ciudadana, José Ignacio Echevarría, aclara que no se le arrestó. "Se le tomó la filiación", aseguró ayer.

A continuación, un grupo de jóvenes exaltados se armaron de piedras y ladrillos y comenzaron su ataque. "Hicieron eso en represalia por la detención de su amigo", explicó un vecino. Según la Jefatura Superior de Policía, hubo un ciudadano herido y los jóvenes lanzaron petardos a un patrulla cuando acudían a auxiliarle.

La concejal del distrito, Carmen Torralba, estaba en las fiestas de la Villa de Vallecas (el otro distrito que preside, junto al de Vicálvaro) cuando se enteró de los hechos. Sobre las dos de la madrugada se encontró con las banderas quemadas. "La Policía Municipal identificó a un joven que llevaba 15 petardos y estaba al lado de la hoguera de la bandera [el detenido antes mencionado], llevaron al herido al equipo quirúrgico número 3 y luego acudieron a la comisaria a denunciar los hechos", explica la edil.

Minuta policial

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El comisario de San Blas, Francisco Valderas, aseguró el lunes a la concejal -que se puso en contacto con él- que desconocía los hechos, y negaba que la Policía Municipal hubiese presentado una denuncia allí. En la comisaría sólo figuraba una minuta de la patrulla de la Policía Municipal, que daba cuenta de la lesión al ciudadano, sin que se hubiera realizado otro tipo de gestión.La Jefatura Superior de Policía ha expedientado al inspector de guardia por grave negliencia. Según un comunicado emitido ayer, el inspector "no actuó de forma reglamentariamente establecida", ya que no se efectuó "investigación alguna" ni "otro tipo de gestión" tras la denuncia de la policía local.

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