GENTE

EL DIABLO LLENÓ LA COPA

Kenneth Hagberg, de 46 años, era hasta la semana pasada redactor jefe de la revista que edita la asociación sueca de conductores abstemios (MHF), y en el ejercicio de dicha función había predicado durante 13 años contra toda transgresión de las reglas de sobriedad durante la conducción. El endurecimiento de dichas, reglas y las sanciones -cero por ciento de alcohol en la sangre y cárcel para los transgresores- fueron algunas de las normas pregonadas en las campanas del diario. El pasado fin de semana, tras participar en una conferencia sobre el tema La juventud y el alcohol en el tráfic...

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Kenneth Hagberg, de 46 años, era hasta la semana pasada redactor jefe de la revista que edita la asociación sueca de conductores abstemios (MHF), y en el ejercicio de dicha función había predicado durante 13 años contra toda transgresión de las reglas de sobriedad durante la conducción. El endurecimiento de dichas, reglas y las sanciones -cero por ciento de alcohol en la sangre y cárcel para los transgresores- fueron algunas de las normas pregonadas en las campanas del diario. El pasado fin de semana, tras participar en una conferencia sobre el tema La juventud y el alcohol en el tráfico, Hagberg tuvo un accidente de automóvil de regreso a casa. Al llegar la policía y someterlo a la prueba de rutina, la medida de alcohol en su sangre era de 1,2%, muy por encima del 0,2% permitido en Suecia (un 1% es considerado como borrachera y puede suponer penas de dos años de cárcel). El diablo, encarnado en un amigo, le había ofrecido un whisky que resultó su perdición. "Esto es una tragedia para mí y para mi familia", declaró Hagberg, que adujo haber estado sometido a tensiones familiares y laborales, al tiempo que anunciaba su renuncia al cargo de la revista y como miembro de la asociación.

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