Sánchez Bella compra el 12% de Grand Tibidabo para controlar la sociedad

El ex ministro de Información y Turismo de Franco, Alfredo Sánchez Bella, ha adquirido al Banco de Santander un 12% del capital de Grand Tibidabo por unos 206 millones de pesetas. Esta operación protagonizará la junta de accionistas de la sociedad que se reúne hoy en Barcelona. Tras la compra, Sánchez Bella ostentará en la reunión el control del 17% de la sociedad, incluyendo un 5% de la agrupación de pequeños accionistas Cartera GT. Enfrente, el consejo, presidido por Jaume Casajoana, tiene acreditada una representación del 14%, incluyendo el 12% de una agrupación de pequeños accionistas ...

El ex ministro de Información y Turismo de Franco, Alfredo Sánchez Bella, ha adquirido al Banco de Santander un 12% del capital de Grand Tibidabo por unos 206 millones de pesetas. Esta operación protagonizará la junta de accionistas de la sociedad que se reúne hoy en Barcelona. Tras la compra, Sánchez Bella ostentará en la reunión el control del 17% de la sociedad, incluyendo un 5% de la agrupación de pequeños accionistas Cartera GT. Enfrente, el consejo, presidido por Jaume Casajoana, tiene acreditada una representación del 14%, incluyendo el 12% de una agrupación de pequeños accionistas de la sociedad. Anoche, el consejo buscaba nuevos paquetes de acciones para aumentar su porcentaje.

El resto de las acciones está, repartido entre un 20% en manos de De la Rosa, pero que en la junta estará representado por dos administradores judiciales nombrados por el juez instructor del caso Grand Tibidabo, Joaquín Aguirre, y el resto ampliamente repartido entre miles de peque¡íos accionistas.

Valoración muy inferior

En la compra de las acciones del Santander, cada acción de Grand Tibidabo se ha valorado en 55 pesetas, casi cuatro veces y media menos que las 237 pesetas en que se valoró en el acuerdo firmado el pasado viernes entre Javier de la Rosa y el consejo de la sociedad. En esa operación, el expresidente de Grand Tibidabo, acusado de los presuntos delitos de estafa, apropiación indebida y falsedad, consumó un nuevo pelotazo al vender a la sociedad el 20% de las acciones para cancelar una parte de sus deudas, que ascendían a 3.900 millones.La papeleta más complicada para el consejo será explicar por qué aceptó firmar ese acuerdo que valoraba las acciones de De la Rosa a un precio un 40% superior al valor contable reconocido por la sociedad, y cuatro veces superior a su valor de cotización, que es de 65 pesetas.

Casajoana también deberá explicar a los desmoralizados y arruinados pequeños accionistas de Grand Tibidabo cuál es su visión sobre el futuro de la sociedad. Durante los dos últimos años las pérdidas brutas han sumado 25.000 millones, lo que representa dos terceras partes de sus recursos propios. Para compensarlas, los recursos propios de la sociedad se reducirán desde 20.000 millones a tan sólo 5.000. Asimismo, los auditores han expresado dudas -sobre el futuro de la empresa, aquejada de una acuciante falta de recursos.

Por otra parte, el juez Aguirre, ha requerido a la sociedad Grand Tibidabo que retire los títulos de las acciones de la sociedad de Quail España, propiedad de, De la Rosa. La medida del juez se produce un día después de que nombrara a dos administradores judiciales para controlar las acciones de Grand Tibidabo en poder del financiero y dejara sin efecto la transacción de venta de acciones de De la Rosa -formalmente propiedad de la sociedad Nueva Madrugada- a Grand Tibidabo. Asimismo, Aguirre decidió ayer embargar las acciones de Grand Tibidabo en poder de una entidad financiera de Liechtenstein por tener el convencimiento que ese paquete accioniarial -algo más de dos millones de acciones- tambié está controlado por De la Rosa. En el caso de Quail, se trata de más de cuatro millones, de acciones. Con una y otra medida, el juez pretende evitar que esas acciones tengan voto en la junta de accionistas de Grand Tibidabo que se celebra hoy.