GENTE

LARGO AUTÓGRAFO

El cantante y protagonista de culebrones Carlos Mata, nacido en Caracas, presentó su nuevo trabajo musical, Amaneciendo, con una gripe primaveral que le impedía casi hablar. Con respecto a este disco, dice: "Es de los más coherentes y mejor logrados. Me parece refrescante, tiene ritmos caribeños, bailables, y sobre todo sigue en mi línea romántica". En lo referente a las letras de las canciones, explica: "Tienen una relación directa con el Caribe y con esa cosa hermosa que los autóctonos de estas zonas no han perdido; a pesar de su situación económica difícil, conservan la...

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El cantante y protagonista de culebrones Carlos Mata, nacido en Caracas, presentó su nuevo trabajo musical, Amaneciendo, con una gripe primaveral que le impedía casi hablar. Con respecto a este disco, dice: "Es de los más coherentes y mejor logrados. Me parece refrescante, tiene ritmos caribeños, bailables, y sobre todo sigue en mi línea romántica". En lo referente a las letras de las canciones, explica: "Tienen una relación directa con el Caribe y con esa cosa hermosa que los autóctonos de estas zonas no han perdido; a pesar de su situación económica difícil, conservan la frescura y permanece el amor ante la vida y el compromiso. Las posibilidades que te ofrece cada nuevo amanecer". Este hombre, que se dio a conocer en España con la llegada del culebrón, reconoce que en el papel que más a gusto se ha sentido ha sido en el de Tito Clemente para La dama de rosa, y que cantó los temas musicales de Topacio y Déjate querer, y que no piensa hacer telenovelas en este momento. Uno de sus sueños es dirigir cine. Debido a su fama le suceden curiosas anécdotas, como cuando "salía de un concierto entre guardas de seguridad, a toda velocidad, y una chica me dijo: 'Fírmame un autógrafo'; yo casi no podía, pero le dije: '¿Dónde te lo firmo?'. Ella me señaló su pecho". Carlos sonríe y continúa su explicación: "Pues claro, la dedicatoria fue más larga de lo normal". O "en un concierto en Canarias una señora de noventa y tantos años que hacía mucho que no salía de su casa vino a un concierto y después me dijo: 'Ahora sí me puedo morir tranquila'. Me resultó muy tierno".-

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