"Me fui porque sólo quería jugar"

A los 21 años, José Luis Morales ya ha hecho el viaje de ida y vuelta en uno de los grandes. En el Madrid vivió un efímero éxito en el último tramo de la pasada Liga y, sin tiempo para saborearlo, se vio incluido en el grupo de traspasos que ayudaría a financiar la reconversión de la era Valdano. Morales lucha ahora por la permanencia en el Sporting y esta tarde regresa con su nuevo equipo al Bernabéu.Pregunta. ¿Les anima pensar que tienen poco que perder hoy ante el líder?

Respuesta. Basta con mirar la clasificación, pero no vamos vencidos de antemano. En caso contrario, ...

A los 21 años, José Luis Morales ya ha hecho el viaje de ida y vuelta en uno de los grandes. En el Madrid vivió un efímero éxito en el último tramo de la pasada Liga y, sin tiempo para saborearlo, se vio incluido en el grupo de traspasos que ayudaría a financiar la reconversión de la era Valdano. Morales lucha ahora por la permanencia en el Sporting y esta tarde regresa con su nuevo equipo al Bernabéu.Pregunta. ¿Les anima pensar que tienen poco que perder hoy ante el líder?

Respuesta. Basta con mirar la clasificación, pero no vamos vencidos de antemano. En caso contrario, lo mejor sería que no hiciéramos el viaje y que se anotaran ellos un, 1 a 0 a su favor. Vamos con moral y con ganas y podemos hacer algo si el Madrid no tiene una tarde inspirada.

P. ¿El empate reciente del Albacete en el Bernabéu, es su mejor referencia?

R. No, porque el Madrid jugó ese día bastante mal y no es probable que vuelva a hacerlo así ante nosotros, salvo que haya entrado en un bache. El Albacete jugó muy a la defensiva y así sólo se puntúa cuando falla el contrario. El único secreto consiste en mantener la máxima concentración los 90 minutos.

P. ¿Cómo se siente ante su regreso al Bernabéu?

R. No siento nada especial. Es un partido más en el que antes podré saludar a unos cuantos amigos.

P. ¿Se considera uno de los sacrificados para costear el proyecto de Valdano?

R. A mí me dieron una oportunidad de jugar este año en Primera y la acepté sin pensarlo dos veces. No me planteé si tenía que irme del Madrid para financiar un proyecto, porque lo que me interesaba era jugar los domingos. Me fuí porque sólo quería jugar. Y eso es precisamente lo que estoy haciendo ahora en el Sporting de Gijón.