Tribuna:

¿Quién se revaloriza?

Es curioso ver ahora, ya desde la lejanía del tiempo, cómo se van sucediendo los acontecimientos año tras año en este gran club que deja de serlo gracias a la inestimable colaboración de su presidente y que también año tras año alcanza los objetivos que únicamente parecían reservados a los más humildes.Conseguir una Supercopa, jugar una final europea y otra de Copa, o acudir a la selección fueron acontecimientos que siempre recordaré con agradecimento hacia los que me ayudaron: Luis Aragonés, Vicente Calderón y por supuesto a la entidad. Pero, duró lo que Vicente Calderón.

Hace tiempo, ...

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Es curioso ver ahora, ya desde la lejanía del tiempo, cómo se van sucediendo los acontecimientos año tras año en este gran club que deja de serlo gracias a la inestimable colaboración de su presidente y que también año tras año alcanza los objetivos que únicamente parecían reservados a los más humildes.Conseguir una Supercopa, jugar una final europea y otra de Copa, o acudir a la selección fueron acontecimientos que siempre recordaré con agradecimento hacia los que me ayudaron: Luis Aragonés, Vicente Calderón y por supuesto a la entidad. Pero, duró lo que Vicente Calderón.

Hace tiempo, por ejemplo, yo habría dejado este juego si hubiese hecho caso de los sabios consejos de este iluminado. Me recomendó abandonar el club por atreverme a ir con mujeres de manera ostentoria y por estar acabado para el fútbol... Otros compañeros fueron menos afortunados. La recomendación les llegó por vender zapatos, o por estudiar y ser demasiado listos.

En realidad, no me explico por qué a los jugadores del Atlético les cuesta entender lo que les pide su presidente. Quizá, Caminero tendría que ser más constante, o Manolo debería estar más acertado. No parece que sea tan difícil. Es cuestión de tiempo asimilar sus preceptos. Algo no encaja: o los jugadores son poco receptivos o su presidente tiene dificultades para transmitir sus deseos.

Supongo la tremenda frustración de Gil después de tantos años de proyectos echados abajo por las contínuas renovaciones de jugadores y técnicos. Egoístamente, eso sí, no nos queda más remedio que agradecerle que siga a cargo del club. Su continuidad significa que el Atlético va camino de ocupar un puesto que estaba reservado para algunos equipos como el mío. Imagínense lo que piensan los que luchan por conseguir un puesto en Europa y tienen un oponente menos que, tendría que estar con ellos.

Comprendo la necesidad que sufren algunos medios de mantener vivo este fenómeno, pero es triste ver la falta de escrúpulos y dignidad en la que se mueven ciertos personajes. Le permiten todo. Gracias a él, sin ningún tipo de esfuerzo, han conseguido lo que de otra manera habría sido imposible. No es lo único.

¿Conocen algún jugador que se haya revalorizado en este equipo en los últimos años? Y todo por cambiar la proyección deportiva por el respaldo económico. Aguantar la presión de por sí no es fácil, pero en este club, con el garrote de Gil cerca de la cabeza, menos aún. La verdad, no parece que lo hayan conseguido muchos.

!Qué tranquilo se ven las cosas desde lejos!

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