Entusiasmado

Estoy entusiasmado. Abro EL PAÍS del 3 de octubre por la sección de Deportes y me encuentro, con grata sorpresa, los resultados de la carrera de caballos del Arco del Triunfo (Longchamps).Ávido de ilusión corro con presteza a comunicárselo a un amigo. Mediante este artículo veo la carrera paso a paso, el avance cadencioso y sorpresivo de Carnegie, que a la postre sería el ganador en la meta, la traición que la suerte ofreció a los favoritos, los gritos desesperados del yóquey japonés Take, los caballos yendo más allá de lo imaginable, la gloria de ser el primero en una carrera de...

Estoy entusiasmado. Abro EL PAÍS del 3 de octubre por la sección de Deportes y me encuentro, con grata sorpresa, los resultados de la carrera de caballos del Arco del Triunfo (Longchamps).Ávido de ilusión corro con presteza a comunicárselo a un amigo. Mediante este artículo veo la carrera paso a paso, el avance cadencioso y sorpresivo de Carnegie, que a la postre sería el ganador en la meta, la traición que la suerte ofreció a los favoritos, los gritos desesperados del yóquey japonés Take, los caballos yendo más allá de lo imaginable, la gloria de ser el primero en una carrera de este calibre; o, como dijo Fernando Savater en alguna ocasión, la posibilidad de haber luchado por ella. Reitero mi gratitud por acordarse de las minorías, especialmente al periodista E. Gimeno, que escribió el artículo.-