Ni tontos ni malos

Para conocer qué piensan los niños madrileños acerca de los dibujos animados, María Esther del Moral entrevistó a 550 niñas y niños madrileños con edades comprendidas entre los 8 y los 12 años de colegios públicos y privados en Vallecas, Carabanchel, Aluche, El Viso y Las Rozas. A todos ellos les hizo 27 preguntas sobre dibujos animados, hobbys y deportes favoritos.Entre otras cosas, descubrió que niños y niñas perciben sobretodo los personajes masculinos (en un porcentaje del 80%), frente a un 20% de personajes femeninos. Los primeros son mayoritariamente guerreros o deportistas, mient...

Para conocer qué piensan los niños madrileños acerca de los dibujos animados, María Esther del Moral entrevistó a 550 niñas y niños madrileños con edades comprendidas entre los 8 y los 12 años de colegios públicos y privados en Vallecas, Carabanchel, Aluche, El Viso y Las Rozas. A todos ellos les hizo 27 preguntas sobre dibujos animados, hobbys y deportes favoritos.Entre otras cosas, descubrió que niños y niñas perciben sobretodo los personajes masculinos (en un porcentaje del 80%), frente a un 20% de personajes femeninos. Los primeros son mayoritariamente guerreros o deportistas, mientras que las segundas son deportistas, madres o amas de casa. Además, niños y niñas prefieren mayoritariamente la programación infantil de TVE-1.

A nivel de gustos, ellos apuestan por las series deportivas o aquéllas en las que predominan la lucha y la violencia, y siempre desean parecerse a personajes masculinos.

Por su parte, ellas no tienen mucho interés por las series en las que los personajes femeninos son auxiliares y sí prefieren aquéllas de contenido romántico o las deportivas en las que los héroes son niñas, como en el caso de las voleibolistas de La panda de Julia y Juana y Sergio.

Pero mientras los chicos valoran la fuerza y valentía de sus héroes, las chicas optan por el atractivo físico y bondad. Lo que sí hacen ambos grupos es rechazar a los malos y a los tontos.

Todos los chicos encuestados manifestaron ver la televisión solos, con lo que se corrobora el rol de guardería que cumple la televisión en muchos hogares. Pero Del Moral señala que este singular canguro es ventajoso: sus historias permiten al niño organizar y comprender mejor sus propias experiencias, potencia su curiosidad y homogeniza sus gustos.