"Tuvimos un idilio con Madrid en los setenta"

Junto a Anna Rosa Cisquella y a Miquel Periel, dirige Dagoll Dagom, la veinteañera compañía teatral catalana que va por todo el país celebrando sus cuatro lustros de vida con una antología de su repertorio titulada Historietas. Joan Lluís Bozzo es, además, uno de los más veteranos de esta formacion.Lleva 17 años, que comenzaron a contar justo cuando la compañía se profesionalizó. Hacía mas de cuatro años que los escenarios madrileños no acogían el original arte de Dagoll Dagom.



Pregunta. Todavía es un enigma el significado de su, nombre.

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Junto a Anna Rosa Cisquella y a Miquel Periel, dirige Dagoll Dagom, la veinteañera compañía teatral catalana que va por todo el país celebrando sus cuatro lustros de vida con una antología de su repertorio titulada Historietas. Joan Lluís Bozzo es, además, uno de los más veteranos de esta formacion.Lleva 17 años, que comenzaron a contar justo cuando la compañía se profesionalizó. Hacía mas de cuatro años que los escenarios madrileños no acogían el original arte de Dagoll Dagom.

Pregunta. Todavía es un enigma el significado de su, nombre.

Respuesta. No tiene ningún misterio: es una onomatopeya. Parece ser que el fundador de este. grupo, Joan Olle, designaba con estas palabras los objetos de la escuela, y puso este nombre, que es una tortura para los castellanoparlantes.

P. ¿Queda alguien de la primera formación?

R. No queda nadie, porque los primeros eran universitarios que no se han dedicado al teatro.

P. ¿Ha cambiado mucho Dagoll Dagom en estos últimos 20 años?

R. Ha cambiado casi tanto como el país. Al principio era teatro universitario y antifranquista. Luego se profesionalizó, se consolidó como cooperativa. Ahora somos una sociedad anónima.

P. Un espectáculo antológico suena como a despedida. ¿Les queda mucho por delante a ustedes?

R. Espero que muchísimo. Por nuestra parte no hay ninguna intención de que haya un- punto final. Este espectáculo surgió cuando celebramos nuestro quince aniversario. Organizamos una fiesta a la que asistieron todos los actores que trabajaron con nosotros. Fue estupendo. Nos dimos cuenta de que ahí había un espectáculo.P. ¿Qué proyectos tienen para el futuro?

R. Dentro de diez días se empieza a emitir una serie para la televisión autonómica catalana que espero se pase luego por otras comunidades. También estamos preparando una obra de teatro que se estrenará en enero.

P. Da la impresión de que han elegido sobre todo números musicales para sus Historietas.

R. Nuestros últimos espectáculos han sido prácticamente musicales. Pero también hay muchas escenas habladas. Yo creo que está equilibrado.

P. Su actuación en el teatro María Guerrero va a cerrar una etapa del Centro Dramático Nacional. ¿Qué modelo desearía usted para el futuro?

R. Creo que las compañías públicas no tienen un futuro muy claro. La cultura está en manos de los ciudadanos, no sale de los despachos.

P. ¿Cuál de todos sus espectáculos recuerda con más ternura?

R. Me produce cierta ternura No hablaré en clase (1977). Costó 30.000 pesetas. Después del estreno en Madrid tuvimos que pedir al público que nos alojara en su casa. Y lo hicieron. Ahora eso parece de otro siglo.

P. ¿Dagoll Dagom hace humor, música o artes interpretativas?

R. Creo que si tenemos que ser recordados por algo será por haber dado una dimensión nueva al musical. Hemos dado un teatro mediterráneo colorista. Trabajamos para todos los públicos.

P. ¿Cómo se sienten en Madrid?

R. Hubo un idilio con Madrid a finales de los setenta. No sé por qué, se enfriaron las relaciones. No estamos preocupados.Historietas. Hasta el 26 de junio, en el teatro María Guerrero (Tamayo y Baus, 4) a las 20.00. De 1.500 a 2.200 pesetas.