Unos Juegos no tan idílicos

ENVIADO ESPECIALThor Heyerdahl, hijo del famoso explorador de la Kontiki (maestro de ceremonias, junto a la actriz Liv Ullmann, en la apertura), lo anunció hace un mes: "Me exiliaré durante los Juegos. Es todo demasiado caro y grande para una pequeña ciudad como la nuestra". Heyerdahl se está ahorrando mucho dinero, porque ha huido de un auténtico atraco olímpico, mucho mayor que en otras ediciones de los Juegos. Los Juegos ecológicos e idílicos han buscado la eterna garantía de aprovechar la ocasión.

El día 8, el Gobierno noruego ordenó congelar los precios en hoteles, cafés, restauran...

ENVIADO ESPECIALThor Heyerdahl, hijo del famoso explorador de la Kontiki (maestro de ceremonias, junto a la actriz Liv Ullmann, en la apertura), lo anunció hace un mes: "Me exiliaré durante los Juegos. Es todo demasiado caro y grande para una pequeña ciudad como la nuestra". Heyerdahl se está ahorrando mucho dinero, porque ha huido de un auténtico atraco olímpico, mucho mayor que en otras ediciones de los Juegos. Los Juegos ecológicos e idílicos han buscado la eterna garantía de aprovechar la ocasión.

El día 8, el Gobierno noruego ordenó congelar los precios en hoteles, cafés, restaurantes y discotecas de Lillehammer. Los precios en vigor desde el día anterior se deberían mantener hasta el 27, fecha de la ceremonia de clausura. La vigilancia del cumplimiento iba a ser muy estricta. Un comunicado gubernamental incluso llegó a decir: "Una subida excesiva de los precios durante los Juegos perjudicaría gravemente la imagen de Noruega como destino turístico".Los ejemplos son abrumadores. Un hotel medio, que en temporada invernal normal costaría 13.000 pesetas en una habitación individual con desayuno incluido y 19.000 en una doble, vale ahora tres veces más: 38.000 y 60.000, respectivamente. Y se trata, además, de habitaciones de ocho metros cuadrados (estilo mínimo japonés), sin teléfono. Nunca un espacio habitado tan espartano pudo ser tan rentable en 15 días. Pero eso es lo normal que hay aquí, porque las excepciones son ya una locura. En los escasos buenos hoteles que existen, una noche (evidentemente polar afuera, a más de 20 grados bajo cero) ronda las 80.000 o 100.000 pesetas.

En Lillehammer no se come 0 cena con dos platos y postre por menos de 6.000 pesetas, aunque las 10.000 o 12.000 no son raras. Una cerveza vale 900 pesetas y un café 400; la cajetilla de rubio, más de 1.000. Y los números de teléfono en el centro principal de prensa se han borrado para animar a que todo el gasto telefónico se efectúe desde aquí.

Peter Ronningen, director ejecutivo del comité organizador de Lillehammer (1,00C), lo tiene muy claro: "Toda Noruega está inmensa en una gran crisis económica, pero nuestra región sufría un gran retraso, porque ha sido la única que no se ha beneficiado de una salida al mar y de la explotación del petróleo. Queremos convertirnos en el centro turístico del país y vamos a aprovechar la oportunidad olímpica".

España se está superando a sí misma. Se esperaba una floja actuación, pero no los récords que se van batiendo. Ayer, Patricia Portillo fue 24a y también última en las semifinales de los baches de esquí artístico.

El representante masculino, José Javier Rojas, acabó también el 240, aunque de 29 esquiadores. Dieciséis pasaban a la final. Las dos chicas del supergigante estuvieron también como se esperaba. Ainhoa Ibarra fue 27ª, y María José Rienda, 29ª de 46 clasificadas y nueve retiradas. A 2.35 segundos y 2.50, respectivamente, de Dianne Roffe, otra estadounidense que aprovechó la ocasión olímpica.

Rusia se destacó en el medallero con el triunfo de la fondista Ljubov Egorova, que derrotó esta vez en los cinco kilómetros a la italiana Di Centa. En la última competición de la jornada, Rusia, además, sumó otro oro y otra plata. Las parejas Ekaterina Gordeeva-Serguéi Grinkov y Natalia Michkutienok-Artur Dmitriev quedaron primera y segunda en el patinaje por parejas. Se vieron favorecidas por el abandono de la pareja alemana Mandy Woetzel-Ingo Steuer, actuales subcampeones mundiales: Mandy sufrió una caída que la dejó tendida en el hielo sin aliento un buen rato. Necesitó varios puntos de sutura para cerrar una herida en el mentón.

ResultadosEsquí alpino. Supergigante femenino: 1. Dianne Roffe (EE UU), 1.22.15 minutos. 2. Svetlana Gladischeva (Rusia), 1.22.44. 3. Isolde Kostner (Italia), 1.22.45. 4. Pernilla Wiberg (Suecia), 1.22.67. 27. Ainhoa Ibarra, 1.24.50. 29. María José Rienda, 1.24.65.

Esquí de fondo. Cinco kilómetros femeninos: 1. Ljubov Egorova (Rusia), 14.08.8 minutos. 2. Manuela di Centa (Italia), 14.28.3, 3. Marja-Lisa Kirvsneimi (Finlandia), 14.36.0.

Patinaje artístico. Parejas: 1. Naterina Gordeeva-Serguéi Grinkov (Rusia), 1,5 puntos. 2. Natalia Michkutienok-Artur Dmitriev (Rusia), 3. 3. Isabelle Brasseur-Lloyd Eisier (Canadá), 4,5.

Hockey. Grupo B. Suecia, 4; Italia, 1. Estados Unidos, 3; Eslovaquia, 3. Canadá, 3; Francia, 1.