Cartas al director

Budismo

Quiero agradecer a ustedes y felicitarles por el reportaje publicado los días 23 y 24 de enero sobre budismo. Está claro que su autor, Juan Arias, ha estudiado el tema en profundidad, se ha documentado y ha puesto en el trabajo su fina sensibilidad, necesaria, por otro lado, para tratar estos temas que afectan a la parte más delicada del ser humano.Es cierto que, en general, casi todos los medios lo han tratado con respeto, pero entre unos y otros existe la fina raya -perceptible para el que sabe- que separa la información oportuna, basada en los tópicos circulantes, y el trabajo auténtico, fr...

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Quiero agradecer a ustedes y felicitarles por el reportaje publicado los días 23 y 24 de enero sobre budismo. Está claro que su autor, Juan Arias, ha estudiado el tema en profundidad, se ha documentado y ha puesto en el trabajo su fina sensibilidad, necesaria, por otro lado, para tratar estos temas que afectan a la parte más delicada del ser humano.Es cierto que, en general, casi todos los medios lo han tratado con respeto, pero entre unos y otros existe la fina raya -perceptible para el que sabe- que separa la información oportuna, basada en los tópicos circulantes, y el trabajo auténtico, fruto de la investigación y el conocimiento. La moda del budismo es una moda con 2.500 años. Durante este tiempo ha formado parte de la cultura de medio mundo y modelado su pensamiento, aportando también al nuestro valiosos elementos, sobre todo en el campo de la psicología moderna. Se puede hablar, en todo caso, de descubrimiento, disculpándonos por el orgullo de nuestra civilización, que ha despreciado de manera sistemática todo lo que le es ajeno.

Bien venidos, pues, estos acontecimientos, que nos permiten conocer y estimar todo lo que hay de hermoso y válido en nuestro mundo, esté donde esté y venga de donde venga, favoreciendo así la comprensión y la armonía, en vez del odio, el desprecio y el desafecto, que nos llevan continuamente a situaciones límite. Y parabienes a todas las personas que contribuyen a ello de forma generosa y desprejuiciada.-

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