El 'zoo' recluta nuevos inquilinos para paliar el descenso de visitas

Al zoo de Madrid han llegado tres nuevas especies de animales: nueve lemures de Madagascar, una pareja de tapires malayos y cuatro pingüinos de Humboldt (región de Surámerica). Estos ejemplares son un gancho más para atraer gente al zoo, sobre todo después de que el año pasa do se registrara un descenso del 6% en el número de visitantes con respecto a 1992. En total, 800.000 personas acudieron durante 1993 al parque zoológico. En los mejores años, la instala ción superó el millón de visitas.La culpa de este retroceso la tiene, según los responsables de la instalación, la crisis económic...

Al zoo de Madrid han llegado tres nuevas especies de animales: nueve lemures de Madagascar, una pareja de tapires malayos y cuatro pingüinos de Humboldt (región de Surámerica). Estos ejemplares son un gancho más para atraer gente al zoo, sobre todo después de que el año pasa do se registrara un descenso del 6% en el número de visitantes con respecto a 1992. En total, 800.000 personas acudieron durante 1993 al parque zoológico. En los mejores años, la instala ción superó el millón de visitas.La culpa de este retroceso la tiene, según los responsables de la instalación, la crisis económica y el mal tiempo. "En los puentes, que es cuando la gente suele aprovechar para venir al zoo, ha hecho frío y ha llovido mucho", comenta Inmaculada de Ramón, responsable del departamento de Educación, especializado en atender a los colegios y dotarles de material.

A pesar del difícil momento económico, el zoo de Madrid ha incrementado sus tarifas en un 10%. Así, por ejemplo, la entrada combinada de adulto (que da derecho a visitar todas las instalaciones), que el año pasado costaba 1.120 pesetas, vale ahora 1.240 pesetas.

Al zoo acuden en su mayoría familias al completo. Los Viernes Santos suelen ser los días de mayor afluencia. Un total de 20.689 personas pasearon entre los animales ese día del pasado ano.

Bebé tapir

Los nuevos inquilinos del zoo ya se han acostumbrado a su nuevo hogar. Los cuatro nuevos pingüinos viven en unas instalaclones con una piscina para que puedan bañarse. El recinto tiene aire acondicionado para que los pingüinos puedan soportar las altas temperaturas del verano.Por el contrario, los nueve lemures, mamíferos cuadrumanos similares a los monos, aunque de cola anillada, habitan recintos con calefacción, ya que necesitan estar a una temperatura ambiente de entre 17 y 25 grados.

Mucho más delicados son los tapires, de tamaño parecido al de un jabalí. Tienen cuatro dedos en las patas anteriores y tres en las posteriores y necesitan, además de calefacción, una piscina, donde se bañan y a la vez hacen sus necesidades. Ayer un bebé tapir aumentó la familia y constató la aclimatación de la especie.

El parque zoológico ofrece además tres atracciones novedosas: una pradera abierta, donde cuatro gorilas juegan con troncos de madera y juguetes de plástico; la exposición Naturaleza Misteriosa, que muestra una colección de animales curiosos: tarántulas, insectos gigantes y cucarachas, entre otros; y la banda musical de Chu-lin. El famoso panda dirige una banda de músicos, compuesta por la jirafa Gira, el chimpancé Chimpa, el `hipopótamo Hipo y el elefante Trompo.

Zoo de Madrid. De 10.00 a 18.00 horas. Niños de 3 a 8 años, 565 pesetas (entrada simple) y 895 (combinada). Adultos, 840 pesetas y 1.240.