"Pondría un belén en todas las plazas de Madrid"

Comenzó poniendo el belén a sus hijos. De esto hace ya más de 30 años. Y hoy, cuando ya ha cumplido los 70, dedica todo su tiempo de jubilado a la Asociación de Belenistas de Madrid. Este maestro belenista, que presume de las dos medallas de oro y bronce y de los muchos trofeos obtenidos con sus creaciones, dedica todo el mes de diciembre a instalar la mayoría de los belenes que se exhiben en Madrid. En el Museo Municipal se expone uno de sus dioramas (escena del ciclo navideño realizada en un cajón y que se ve a través de un cristal): Huida a Egipto.Pregunta. ¿Qué secretos t...

Comenzó poniendo el belén a sus hijos. De esto hace ya más de 30 años. Y hoy, cuando ya ha cumplido los 70, dedica todo su tiempo de jubilado a la Asociación de Belenistas de Madrid. Este maestro belenista, que presume de las dos medallas de oro y bronce y de los muchos trofeos obtenidos con sus creaciones, dedica todo el mes de diciembre a instalar la mayoría de los belenes que se exhiben en Madrid. En el Museo Municipal se expone uno de sus dioramas (escena del ciclo navideño realizada en un cajón y que se ve a través de un cristal): Huida a Egipto.Pregunta. ¿Qué secretos tiene un belén?

Respuesta. Ninguno. Hacer un belén no tiene ningún secreto. Se trata de, tener imaginación y de ser un poco manitas. Los belenistas tratamos de hacer cosas que sorprendan. Pero no tenemos secretos los unos con los otros. Si descubrimos una nueva técnica, al principio presumimos, pero luego lo contamos todo.

R. ¿Los madrileños prefieren el belén al árbol?

P. Sí. Ahora se vuelve a poner belenes en las casas. Pero hace unos años decayó cuando se metió el árbol. Quizá sea más cómodo y barato, pero lo nuestro es el nacimiento.

P. ¿Cree que a los jóvenes les interesan los nacimientos?

R. Sí que hay una gran inquietud entre la juventud. Pero tienen un problema: primero los estudios, luego se echan novio o novia, y si a la segunda parte le gusta, pues miel sobre hojuelas. Pero si no le gusta, se empiezan a. disgregar.

P. Parece que el belén es cosa de hombres.

R. Y de mujeres. Me sorprende mucho, porque a los cursillos vienen muchas mujeres. Yo doy charlas de electricidad, por eso me llaman el chispa, y al principio no tienen ni idea de lo que es un cable y les da miedo, pero luego acaban soldando bombillas y hablando de transformadores y resistencias.

P. Sin embargo, sólo uno de los belenes que se expone en el Museo Municipal es obra de una mujer (Visitación de la Virgen a Santa Isabel, realizado por Tonia del Amo).

R. Posiblemente tengas razón. Sólo hay una mujer que, por cierto, ha hecho un diorama muy bonito.

P. ¿Hacer un belén es caro?

R. La asociación es pobre. No tiene un duro. Con las mil pesetas que pagamos al año costeamos todos los gastos del local que tenemos. Para sobrevivir tenemos subvenciones y ayudas. En materiales, un belén puede costar cerca de 12.000 pesetas, pero la mano de obra es cara. El diorama que he hecho este año y en el que he empleado ocho horas diarias durante más de cinco meses, por menos de 300.000 pesetas no lo hago.

P. ¿En que rincón de Madrid pondría usted un nacimiento?

R. Yo pondría uno en todas las plazas. El mejor sitio es la plaza del Rollo. Ahí se puede poner un belén dentro de una carpa monumental, como la que hizo nuestro querido presidente, Femando Cruz, frente al Ayuntamiento de París.

P. ¿Por qué todos los belenes que se exponen se concentran en la zona Centro de Madrid?

R. Porque se visitan más que en el extrarradio. Recuerdo que uno de los que más visitaron los madrileños fue uno que pusimos un año en el Centro Cultural de la Villa.

P. Me imagino que el mejor belén lo tendrá en su casa.

R. Pues, en casa del herrero cuchillo de palo. Sólo tengo un misterio de escayola decorado por mi hija con pan de oro. En cajas tengo figuras esperando que les llegue el turno.