Cartas al director

Llenar depósitos

Imagínese usted que un día cualquiera se acerca a la tienda habitual a comprar el diario litro de leche. Entonces, el tendero le invita a pasar a la trastienda para que usted mismo se sirva de un cántaro de 50 litros. Ante su asombro, le advierte el tendero que así funciona el nuevo servicio y que, la próxima vez, se traiga una lechera como la de su abuelita. En efecto, así lo hace por no saber de ninguna otra lechería próxima. Entonces usted, que no es de campo, no solamente derrama el blanco líquido en sus lustrosos pantalones, sino que se confunde de cántaro: en vez de servirse de la semid...

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Imagínese usted que un día cualquiera se acerca a la tienda habitual a comprar el diario litro de leche. Entonces, el tendero le invita a pasar a la trastienda para que usted mismo se sirva de un cántaro de 50 litros. Ante su asombro, le advierte el tendero que así funciona el nuevo servicio y que, la próxima vez, se traiga una lechera como la de su abuelita. En efecto, así lo hace por no saber de ninguna otra lechería próxima. Entonces usted, que no es de campo, no solamente derrama el blanco líquido en sus lustrosos pantalones, sino que se confunde de cántaro: en vez de servirse de la semidesnatada, lo ha hecho de la leche entera, que tan mal le sienta para el colesterol. No le dejan rectificar, a no ser que abone dos litros. A la hora de pagar, le sorprende que el precio siga siendo el mismo que cuando usted la compraba ya embotellada.Pero el desánimo se apodera definitivamente de usted cuando pregunta al blindado-acristalado-dueño por el dependiente que había antes, y le contesta que ha sido despedido porque, con este moderno y revolucionario sistema, ya no se le necesita "¡qué lástima, siempre cambiábamos unas palabras, era tan simpático!"-

Esto mismo, sin ser una alegoría, nos está pasando con las gasolineras -sírvase usted mismo-, luego pásese por ventanilla, con el agravante que supone la peligrosa manipulación de los hidrocarburos. Cada uno sabrá dónde tiene que llenar el depósito de su vehículo dependiendo de la sociedad que anhela-

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