Moncho Borrajo piensa que 'Aquí no hay crisis'

Moncho Borrajo, cómico solitario, vuelve a Madrid con el espectáculo Aquí no hay crisis. Tan optimista aseveración obedece a un análisis sociológico: "Yo creo que la crisis actual es psicológica y obsesiva. Hay que quitar psicosis. En España, más que crisis, hay resaca del 92; es decir, de las Olimpiadas, de la Expo y del Xacobeo", dice. Y para demostrar que la crisis es sólo aparente, los precios para verle son de vacas gordas, hasta 4.000 pesetas.Borrajo, curtido en cafés valencianos de los años setenta, saltó a la notoriedad en Barcelona en 1978, con su espectáculo Aguijón 79....

Moncho Borrajo, cómico solitario, vuelve a Madrid con el espectáculo Aquí no hay crisis. Tan optimista aseveración obedece a un análisis sociológico: "Yo creo que la crisis actual es psicológica y obsesiva. Hay que quitar psicosis. En España, más que crisis, hay resaca del 92; es decir, de las Olimpiadas, de la Expo y del Xacobeo", dice. Y para demostrar que la crisis es sólo aparente, los precios para verle son de vacas gordas, hasta 4.000 pesetas.Borrajo, curtido en cafés valencianos de los años setenta, saltó a la notoriedad en Barcelona en 1978, con su espectáculo Aguijón 79. Posteriormente recorrió España con montajes ampliamente coreados: Ni a tontas ni a locas, Moncho gusto, Borrajo perdido, Caca y cola.

El artista se considera seguidor del cabaré alemán y del café-concert argentino. Admira a Miguel Gila. En Aquí no hay crisis, además de enfangarse en la resaca mencionada, Borrajo tiene la osadía de imitar a Chavela Vargas. Intentará provocar la carcajada emulando a los videntes y al ecologismo, para lo cual se disfraza de Margarita que protesta de los hombres. Utilizando su notable capacidad de improvisación, grabará cada noche un bolero original dedicado a algún espectador y luego le regala el casete.

Moncho Borrajo actúa en la sala Windsor (Callao) todos los miércoles y jueves (0.30) y viernes y sábados (1.00). Miércoles y jueves, 3.500 pesetas; viernes y sábados, 4.000.